MunDandy

MunDandy

Afganistán

Valle de Bamyan (por Alberto Campa)

ValledeBamyanAlberto_01

Dos grandes budas tallados se encontraban en las cortadas paredes de esta montaña de Bamyan y, aunque hoy sólo quedan los pocos restos dentro de lo que durante tantos siglos fueron sus cavidades de acogida, aún se dejan vislumbrar las grandes y esbeltas formas de aquellas figuras tan veneradas por el antiguo budismo de la zona.

Shamama. Así llamaban los lugareños al más pequeño de los budas, cuyo nombre significaba algo así como Reina Madre, y que ya tenía una altura nada desdeñable de 38 metros de talla. Pero su vecino, el situado más al oeste, al que llamaban Salsal o la luz que brilla a través del universo, llegó a tallarse con una increíble altura de 55 metros, siendo una de los mayores figuras de Buda existentes en el mundo.

ValledeBamyanAlberto_02

Caminamos y ascendemos hasta esas vacías cavidades para ver lo que en su día fue algo majestuoso. Hoy quedan las cuevas y escalinatas por las que se ascendía a contemplar a esa altura las cabezas de ambos budas. Antes, muchas cuevas policromadas, así como la parte superior de las cavidades en las que se emplearon, quizá por primera vez, pinturas al óleo para su decoración.

Cuesta caminar por la zona, la respiración se acelera, y es que esta población, cercana a esas míticas montañas del Hindu Kush, está a casi 2.500 metros de altura. Desde lo alto de la base, donde aún quedan restos del primer Buda pequeño construido sobre el siglo VI, se domina todo el valle de Bamyan y sus preciosas tierras cultivadas a punto de ya ofrecer tantos necesarios cereales y buenas patatas.

ValledeBamyanAlberto_03

Este lugar, en medio de Asia Central, recibiría en el pasado influencias de grandes imperios como el persa o el helénico por el oeste e India y China mucho más al este. Pero siendo también encrucijada de paso de cercanas rutas comerciales como esa antigua Ruta de la Seda, sus fértiles tierras siempre fueron preciadas por muchos otros conquistadores como musulmanes y mogoles.

Y sería sólo por culpa del Islam más radical, sorprendentemente después de muchos siglos de existencia de las figuras budistas, cuando comienzan a destruirse pies, manos y caras de lo que serían esas prohibidas representaciones de deidades con formas humanas.

ValledeBamyanAlberto_04

Pero el daño definitivo a los fantásticos budas de Bamiyán llegaría al comenzar este siglo, cuando el régimen de los primeros talibán decide volarlas con dinamita y proyectiles, pocos meses antes de también derribar las occidentales Torres Gemelas de Nueva York.

A partir de ese 2001, la historia quizá ya sea más recordada por todos y sólo cabe decir que el lugar aún sigue siendo Patrimonio Mundial de la UNESCO, pero considerado como en riesgo severo de desaparición a la espera de poder reconstruir algún día parte de su esplendor con las muchas piezas de piedra guardadas y catalogadas en pequeños recintos cerca de las bases de las cavidades.

ValledeBamyanAlberto_05

Visitando a la tarde otros espectaculares lugares cercanos a Bamyan, como las ruinas de la llamada ciudad de los gritos, situada sobre otra alta colina, o al día siguiente la ciudadela que vigilaba la entrada al valle, la vista de toda la geografía de Bami y esa gran pared de los budas en el horizonte es realmente espectacular.

Y para acabar el día, ser obsequiados con un rico té, en casa de la familia de un acompañante amigo de Bamyan y con la compañía de sus pequeñajos hermanos y sobrinos nos hizo acabar de querer y ya recordar para siempre a este lugar y sus amables gentes, estos tan hospitalarios hazaras.

LEAVE A RESPONSE

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

¿Quieres estar al tanto de nuestras actualizaciones? Suscríbete
Loading