Tirana (Condado de Tirana, Albania)
En contra de lo que suele pensarse, los orígenes de Tirana son remotos. En sus inmediaciones existieron asentamientos en época paleolítica y también se han encontrado restos romanos así como de una basílica paleocristiana. La población actual fue fundada a comienzos del siglo XVII, cuando la zona estaba en manos otomanas. Sus principales puntos de interés se encuentran en la Plaza Skanderbeg, donde existe una estatua ecuestre del héroe local homónimo; la mezquita de Ethem Bey, la más antigua de la ciudad; y la iglesia de la Anunciación, perteneciente a la Iglesia ortodoxa albanesa. Con la intención de poner un punto y aparte respecto a tiempos pasados, los nuevos responsables locales de Tirana decidieron decorar algunos edificios de la ciudad con vivos colores a comienzos del siglo XXI. Esta medida, no exenta de polémica por su alto coste, ha servido para revitalizar por completo el paisaje urbano de la capital albanesa, además de dejar definitivamente atrás el tono grisáceo impuesto por la dictadura comunista más tenebrosa de Europa. Aunque estas coloristas edificaciones pueden verse en toda la ciudad, se encuentran especialmente en la orilla del río Rama o a lo largo de los principales bulevares locales. Parece ser que su mantenimiento deja bastante que desear, pero todavía es posible ver bastantes de ellas en buen estado.