Restaurantes del mundo recomendados por viajeros (I)
Crédito: Paco, Vero y Helia una familia viajera
A estas alturas del viaje de la vida creo que tengo bastante claro que la gastronomía es, o debería serlo, un concepto fundamental en el abecedario de cualquier viajero que se precie de ello. Ya, ya sé que son muchos los que pueden pasarse sin ni siquiera echar un mísero vistazo a los monumentos de los lugares que visitan. Más aún son los que sufren una especie de inevitable sarpullido cuando pasan junto a la puerta de algún museo que les impide siquiera atravesarla. Incluso muchos otros ni siquiera se dignan a cruzar una palabra, en parte porque no dominan ninguna lengua que no sea la suya, pero esa es otra historia, con la población local.
Pero, ¿quién no se ha sentido atraído alguna vez ante la posibilidad de probar siquiera un plato o una bebida típica? ¿Existe alguien que haya viajado por el ancho mundo acompañado de tuppers varios y las tan socorridas latas de conserva? Puede que haberlos, haylos, pero en todo caso serán una respetable minoría en comparación con aquellos que se sienten interesados por conocer aunque sea de manera efímera la gastronomía de los lugares que visitan. Picado por la curiosidad, decidí hace unas pocas semanas preguntar a consumados viajeros por sus restaurantes favoritos y aquí tenéis sus respuestas.
Reitero mi agradecimiento a quienes habéis colaborado en esta entrada tan sabrosa y a todos los lectores tan solo me queda desearles buen provecho.
Crédito: Charcotrip
Tu Hobbie Tu Viaje: Como buena cubana, María nos recomienda el restaurante Zara (Madrid, España) donde es posible disfrutar de la mejor comida de su tierra. En sus palabras: Soy cubana y desde hace tiempo busqué un sitio que me recordara a los sabores de mi país. Lo encontré en este modesto sitio de Chueca, regentado por sus dueños originales, cubana ella y asturiano él. Con el tiempo iba a menudo y llevaba a mis amigos. Ahora se ha cambiado de sitio y lo regentan sus hijos pero sigue manteniendo su calidad. Mi comida favorita: ropa vieja + arroz y plátanos maduros fritos, tamal, aguacates, batido de guanabana y daiquiri… todo genial. Tip: Todo lo que viene en la carta en negritas es típico de Cuba.
Crédito: Viajar a ratos
Viajar a ratos: Maña de pro, Pilar se decide por el restaurante La Senda de Zaragoza (España). Nos cuenta que se ubica alejado del centro, en uno de los barrios obreros de Zaragoza y sus inicios fueron malos pero dio pie a una historia divertida que cuenta en su blog. Ha alcanzado en poco tiempo tal fama que la lista de espera para comer allí en fin de semana es de casi un año. Ayuda el precio, que es bastante ajustado (30 € un menú único) y la comida, realmente especial y original. Acude gente de toda España, pero sigue manteniendo precios y calidad.
Crédito: Ptygirltrips
Ptygirltrips: A pesar de ser panameña, Aylin se decanta por la cocina eslovaca como la que sirven en Slovak House (Bratislava, Eslovaquia) y aquí nos cuenta el porqué: La cocina eslovaca principalmente utiliza ingredientes como la carne de cerdo, harina, patata, col y productos lácteos (más famoso leche y queso de oveja). Debido a que el invierno es muy frío en Eslovaquia, los ingredientes mencionados son los más característicos de este país en sus platillos tradicionales. La gran mayoría de sus platillos con carne se acompañan de ensalada de patata -zemiakový šalát-, hecha de patata cocida con su cáscara. Uno de los platillos más tradicionales de la cocina eslovaca es el famoso -halušky- (hecho de harina, patatas, queso de oveja y tocino). A la hora de comer, el menú eslovaco ofrece primero una sopa (tradicional sopa de ajo u otro caldo), plato fuerte (algún tipo de carne con patatas y ensalada u otro platillo) y el postre. En Eslovaquia es muy popular el arroz y las barbacoas (dependiendo de la región). El licor eslovaco es muy fuerte de graduación de unos 40, 50% aproximadamente como el Slivka y tienen el famoso vino Tokaj que solamente en dos países en el mundo lo hacen (Eslovaquia y Hungría). Adicional por mi experiencia en Bratislava, observé que siempre que te sirven las patatas te las ofrecen con salsa tártara (yo soy amante de esa salsa). Para aquellos que amen la carne de cerdo y las patatas… ¡esta cocina será su favorita!
Crédito: Viajar para vivir
Viajar para vivir: Analucia es de Perú y gran amante de su cocina nacional, pero ha ido hasta casi la otra punta del globo para recomendarnos el restaurante Above Eleven (Bangkok, Tailandia) donde ha podido degustar auténtica comida peruana. Destaca en este local situado en las alturas de la capital tailandesa su cocina de fusión peruano-japonesa aunque también ofrece platos típicos peruanos como el piqueo criollo, el arroz con pato, el ceviche o el tres leches, siempre rematados con un pisco sour como lo cuenta aquí.
Crédito: De perdidos al mundo
De perdidos al mundo: Desde su actual residencia en Cartagena (España), Mafalda viaja hasta Budapest (Hungría) para recomendarnos el restaurante Kisharang étkezde. Dejemos que nos hable de él ella misma: Si por algo recuerdo bien Budapest, además de por la belleza de la ciudad y sus monumentos, es por su exquisita gastronomía. En esta ciudad se encuentra uno de mis restaurantes favoritos del mundo, el Kisharang étkezde. Este restaurante de comida tradicional húngara se encuentra en la calle Oktober 6, u.17, muy cerca de la Basílica de San Esteban. El local es pequeño y acogedor, consta de un comedor interior con cinco mesas y una terraza exterior que da a la calle, con cinco mesas más. Tiene una carta con platos húngaros, de los cuales probamos tres. Crêpes de pollo a la paprika, goulash con spätzle y pollo a la paprika. El precio nos pareció estupendo después de ver la calidad de la comida, y el tamaño de las raciones. Pagamos por los tres platos y dos botellas de agua, 4170 florines, o 16,78 €. No aceptan el pago con tarjeta, pero aceptan euros.
Crédito: Viajamos juntos
Viajamos juntos: Kate y Denys nos sorprenden con la elección de su restaurante al recomendarnos nada menos que la propia naturaleza como atractivo, inmenso y acogedor local. Sus razones las transmiten de esta manera, y yo no puedo menos que estar de acuerdo con ellas: Nosotros no somos (todavía) los que están dispuestos a pagar mucho por una comida, sea en un restaurante de lujo, o con un cocinero de fama mundial, o porque el producto es exquisito. Digo «todavía», porque todo puede cambiar… Sin embargo, nos encanta comer rico y con unas vistas exclusivas. Así que cuando estamos de viaje, siempre intentamos disfrutar al máximo: barbacoas entre los glaciares de Suecia, panceta a fuego en Noruega, o un chuletón de muerte en Islandia. ¿Alguien conoce un restaurante mejor que la naturaleza?
Crédito: Notas en mi libreta viajera
Notas en mi libreta viajera: Exquisita gastrónoma, Mónica se decide por viajar hasta el propio Perú para hablarnos del restaurante La Higuera Escondida. ¿Y qué mejor que sea ella misma con su verbo prodigioso quien lo haga? El mejor ceviche de nuestro viaje por Perú lo probamos en un lugar secreto, discreto y recomendado por un amigo de Lima: La Higuera Escondida (JR Castilla 1032 en Magdalena del Mar). Nada hace sospechar el delicioso ceviche que Edgardo, parco en palabras pero de mirada amable, prepara en su casa. Porque es allí donde nos recibe, a la puerta de su casa para hacernos pasar a un humilde y sencillo patio interior donde degustaremos varios platos exquisitos. No en vano es frecuentado por la alta sociedad de la ciudad aunque ese día estuvimos solos, como si fuéramos los invitados de honor de esta amable familia.
Crédito: Paco, Vero y Helia una familia viajera
Paco, Vero y Helia una familia viajera: Si Mónica es una gran conocedora de la gastronomía de los lugares que visita, Vero no se queda atrás para nada. Se decanta por la exquisita (doy fe) cocina balinesa y nos recomienda nada menos que tres restaurantes en Ubud. Para empezar, el Café Lotus: El más bonito de todos, tiene un estanque lleno de nenúfares y un templo. Los fines de semana se realizan danzas tradicionales allí. El plato estrella es el Ristafel, una combinación gastronómica de platos típicos balineses en pequeñas porciones. De postre un delicioso helado de vainilla pondrá la guinda a una cena deliciosa a la par que romántica. Seguimos con el Babi Guling Ibu Oka: Toda una institución en Ubud. En Ibu Oka se comienza la jornada laboral bien pronto ya que los jugosos cerdos se doran durante horas a un fuego lento siendo girados en los rodillos manualmente por cocineros, que cuidan con esmero que la piel del cochino quede bien crujiente. Encontrar un sitio libre para sentarse es casi misión imposible. Atestado de locales y visitantes, se sirven platos combinados de verduras, arroz y delicias del marrano. El chef Fred Chesneau dedico parte de su programa de Bali a la cocina artesanal que se realiza en Ibu Oka. Y terminamos en el Bebek Bengil: El pato sucio es la especialidad este romántico restaurante. Rodeado por arrozales y distribuidas las mesas en un precioso jardín, sirven pato asado acompañado de otras viandas. De todos ellos habla más extensamente aquí.
Crédito: Viajes y vivencias
Viajes y vivencias: Pepa nos lleva hasta Grecia para descubrirnos las esencias de la cocina mediterránea y lo hace en la isla de Naxos, donde se encuentra el restaurante Metaxi mas. Así lo define ella. Grecia es un país con una gastronomía excelente a buen precio; en cualquier restaurante comerás estupendamente por no demasiado dinero. Llama mucho la atención el buen gusto de los griegos en la decoración de sus bares y restaurantes; son capaces de añadir toques de modernidad a sitios tradicionales consiguiendo ambientes fantásticos para disfrutar de la comida. En las islas son típicas las terrazas con sillas de enea y manteles de cuadros, a las que acuden locales y turistas para degustar las especialidades helenas. En Naxos, la mayor de las Islas Cícladas, en el centro de su capital, Chora, está el restaurante Metaxi mas, en el que comimos estupendamente nada más llegar a la isla. Pedimos mousaká, albóndigas de calabacines, calamares asados y por supuesto unas Mythos bien frías. Otras especialidades que no puedes dejar de probar si vas a Grecia son el tzatziki (salsa fresca de yogur y pepino), la melitzanosaláta (ensalada en crema de berenjenas), jtapódi sti sjára (pulpo a la brasa), souvláki (pincho de carne), biftéki (hamburguesa), dolmadakia (hojas de parra rellenas de arroz o carne) y de postre en muchas ocasiones te invitan a sandía y si eres goloso tienes que probar el baklavá, dulce de origen turco a base de miel y frutos secos, pequeños pero contundentes.
Crédito: Apeadero
Apeadero: Iván se decanta por la exquisita cocina checa (también doy fe) y nos lleva hasta Praga, donde está situado el pub Atmosphere. Nos habla del local de esta manera. En general Praga es una ciudad donde se puede comer de una manera muy económica. Nuestro preferido es el pub Atmosphere dónde por 4 o 5 euros disfrutarás de platos muy elaborados y ricos. Situado a poca distancia del Puente de Carlos, pero bastante escondido, en una callejuela perpendicular al río, este sencillo restaurante se ha ganado la fama entre los Erasmus de la ciudad por sus generosas raciones y la alta calidad de su cocina. Eso sí, no esperes lujos, el restaurante no es gran cosa desde el punto de vista arquitectónico o decorativo, una simple terraza y dos oscuros habitáculos es todo lo que ofrece. La carta está en inglés y cocinan comida checa (patatas, carnes, etc).
Crédito: Charcotrip
Charcotrip: Olga se desplaza nada menos que hasta Irán, concretamente hasta la localidad de Isfahán, para recomendarnos el restaurante Bastani. Y lo hace de esta manera. Fue en Isfahán, Irán que encontramos el restaurante Bastani. Nos gustó tanto que volvimos todos los días que estuvimos en esa ciudad. La decoración del lugar es bonita, muy turística eso no lo podemos negar, las paredes pintadas con escenas históricas y con detalles de espejos como los que vimos en varios palacios. A la hora de comer se puede escoger la manera de comer «occidental» o sea sentado en una mesa o la «local» que es comer sentado en una alfombra que está sobre una plataforma de madera. Nosotros siempre comimos de la manera local y lo disfrutamos mucho. Ahora el punto fuerte: la comida. Tienen un menú muy variado, pasando desde los ricos kebabs hasta preparados de berenjena, sopas de verduras, arroz a más no poder, cordero y otras delicias. Antes de traer los platos fuertes pasará alguien que ofrecerá entradas como ensaladas y yogurt preparado, pero lo rechazábamos porque con los platos fuertes era suficiente. Cada vez salíamos llenísimos y contentos, además encima de todo el trato del personal fue muy bueno.
Crédito: El Caldero Viajero
El Caldero Viajero: Ïa nos lleva a una recóndita caleta de pescadores chilena, donde nos recomienda el restaurante Miramar. Allí la especialidad es el marisco, como ella misma nos cuenta. Quintay es una pequeña caleta de pescadores a unos 40 km. al sur de Valparaíso que en el pasado fue sede de la planta ballenera más grande de la costa pacífica de América. Preguntar a los lugareños (después de visitar el museo ballenero, hoy pro-conservación) cuál es un buen sitio para comer pescado fresco, es encontrarte con una ristra de brazos que acaban en dedos índices que apuntan al restaurante Miramar. El restaurante es un lugar sencillo y acogedor, con preciosas mesas de madera que conservan las formas de los troncos de las que fueron hechas, y una terraza con unas vistas maravillosas al Pacífico en el que flotan los pelícanos y las algas de cochayuyo. Allí aconsejamos degustar por ejemplo para empezar, unos deliciosos locos, una especie de lapa gigante, de carne suave y sabor delicioso muy apreciados en Chile y en Perú. Podremos seguir con unas sabrosísimas machas a la parmesana, un molusco que se sirve en cuenco de greda en un guiso de nata y parmesano gratinado y terminar con una fresquísima y jugosa reineta a la brasa. Todo ello acompañado de generosas cantidades de tomate y palta (aguacate) y otros condimentos. Y después de la comilona, un paseíto hasta la maravillosamente solitaria «playa chica» para bajar la comida pondrían el broche a un día perfecto en Quintay.
Crédito: Mochileros 2.0
Mochileros 2.0: La cocina japonesa no puede faltar en una lista de restaurantes recomendados que se precie. Por ella apuesta Víctor, que nos recomienda el restaurante Harajuku Gyoza Lou, situado en la zona de Shibuya, en Tokio. Nos cuenta como llegar hasta él y sus características más destacadas. Localización: La estación de metro más cercana es Meijijingumae Station. Saldremos por la salida 4, caminaremos por la calle 413, pasando el cruce con la calle Meiji Dori, justo antes de la tienda de juguetes Kiddy Land giraremos a la derecha por el callejón, y nos lo encontraremos a la derecha en el primer cruce. El Harajuku Gyoza Lou es un restaurante especializado en gyozas. El menú es muy sencillo, ya que podemos elegir entre las gyozas al vapor o a la plancha, y como segunda opción elegiremos si queremos las clásicas o con ajo y nira (cebollino chino). Como acompañantes podremos elegir entre brotes de soja con carne, arroz con caldo de carne, o repollo en vinagre. Los precios son sencillos, cada plato de 6 gyozas 290 yenes, con lo que nos podemos permitir probar todas las opciones. Ojo con la cerveza, que nos viene a costar lo que dos platos de gyozas. Para comer podremos elegir entre los taburetes de la barra que rodean la cocina donde veremos cómo nos preparan la comida, o coger una mesa donde estaremos más tranquilos. El restaurante es un muy popular y suele estar bastante lleno, de hecho se suele encontrar una cola ordenadamente formada para entrar, pero no se suele esperar más de 20-25 minutos, y francamente es un lugar por el que merece la pena esperar un rato ya que las gyozas están deliciosas, y seguramente se pida un plato detrás de otro!! Que se lo digan a una nuestra hija… Consideramos este restaurante de Tokyo como uno de los que merecen una visita, por su precio, por sus deliciosas gyozas, y porque al encontrarse cerca de puntos turísticos como el parque Yoyogi, el templo Meiji, Takeshita Dori, se puede cuadrar fácilmente durante uno de los días de visita a esta ciudad.
Crédito: Mil viatges
Mil viatges: Jordi apunta hacia el Cáucaso, concretamente hacia la bastante desconocida pero excelente cocina georgiana y nos recomienda el restaurante Linville, situado en Abkhazia, 9 Tbilisi. Dejemos que él mismo nos cuente sus bondades. Sorprendidos quedamos de la cocina georgiana cuando tuvimos la oportunidad de visitar el país. En concreto os hablaré de un pequeño restaurante, de nombre Linville, que se encuentra en una de las calles más interesantes del centro histórico de Tiflis, la calle Abkhazia. En el primer piso del número 9 se encuentra una antigua casa de principios del siglo XX, decorada de forma exquisita, con altos techos, paredes empapeladas, viejos pianos en las esquinas y lámparas varias colgando del techo. En Linville nos ofrecieron un buena variedad de platos típicos georgianos. Entre ellos, degustamos el ojakhuri, un delicioso plato de carne frita (puede ser de ternera o de cerdo) con patatas y cebollas, todo ello adobado con distintas hierbas aromáticas y que se suele servir en un plato de alfarería.
Crédito: Traviajar
Traviajar: Por último, Diana nos habla maravillas de la cocina malaya y, a pesar de no recordar el nombre del local donde degustó sus excelencias, nos describe a la perfección este sabroso plato. En nuestro último viaje a Asia descubrí que soy una fanática de la comida asiática, ya había analizado que me gusta el sushi y no mucho el arroz chino, pero nunca pensé que iba a disfrutar tanto comiendo noodles y arroz, además del picante, las verduras y las especies que utilizan en este lado del mundo. Sin embargo, puedo decirte que me encantó la comida asiática y definitivamente desde entonces es una de mis favoritas. Este plato que les presento lo disfruté en Kuala Lumpur, en un restaurante estilo galería. Está ubicado en un barrio de migrantes europeos, es pequeño, pero hay muchos puestos de comida dentro, todos ellos venden noodles y arroz, principalmente. Nosotros tuvimos la suerte de topar con uno que preparaba unos deliciosos noodles con verduras y curry, y por lejos te puedo decir que fue el mejor plato de nuestro viaje por Asia. El plato no recuerdo cómo se llama, pero en general contenía algunas verduras, champiñones, tofu y mucho, mucho curry. Estaba picante, pero un picante soportable, de ese que te deja un buen sabor en boca y no te hace querer tomarte un litro de agua con cada bocado. El costo de este plato fue 15 MYR (3,75€) para dos personas, con bebida incluida.
Con estos deliciosos platos que presentan aquí, dan muchas ganas de salir ya mismo a comer, ojalá algo diferente y nuevo en alguno de estos países 😉
Creo que hemos juntado una variada recopilación de platos procedentes de las cocinas más diversas. Espero que le sirva a quienes lo lean y tengan previsto viajar a alguno de esos países.
Muchas gracias por tu aportación.
Madre mía que hambre me acaba de entrar!!! me lanzaba a probar muchos de los platos recomendados y que me son desconocidos ^_^
Por cierto, doy fe que el Lou de Harajuku tiene muy buena fama 😉
Un saludo!
A mí también me gusta probar platos típicos en los lugares que visito, aunque debo reconocer que con alguno no me he atrevido. El local de Tokio que mencionas no lo conozco, pero ya lo tengo apuntado para cuando vuelva a Japón. 🙂
Muchas gracias por tu comentario.
Estupendo Florencio. Cuantos sitios y que variados.
Gracias…
Me alegra que te guste el post, María. Tengo que ir al restaurante Zara a degustar esa deliciosa comida cubana.
Muchas gracias por tu aportación.
Cuando quieras y vengas por Madrid… aquí estamos!
Ahora voy poco por Madrid, pero cuando tenga la oportunidad te avisaré.
Me encanta esta recopilación de restaurantes del mundo, efectivamente Florencio viajar y probar la cocina autóctona está muy unido. Magnifica idea!
Muchas gracias, Pilar. Para mí es una relación indispensable si tratas de acercarte un poco a la cultura local. Y particularmente, casi nunca he salido decepcionado con la experiencia.
Un abrazo.
Que deliciosa recopilación hehehe 😀
Probar la gastronomía local es parte fundamental de nuestra agenda viajera…
Solo hay una vez que recuerdo que no la logre probar: fue un viaje a Viena en mis tiempos de estudiante pobre… recorríamos el centro y mi amiga y yo no teníamos dinero mas que para un McDonalds… igual y no supimos buscar la comida barata local callejera… éramos viajeras novatas. Pero algún día volveré a Austria y probare sus platillos…
En Austria se puede comer muy bien, Olga, especialmente si te gusta la carne. El Wiener schnitzel suele ser una delicia. Yo también tengo alguna experiencia de no probar algún plato concreto de la gastronomía local, pero en mi caso por falta de atrevimiento más que nada. 🙂
Muchas gracias por tu aportación.
Te aseguro que cuando vuelva comeré los platillos que dejé pendientes… pero en serio en ese viaje íbamos de pobres extremo hahaha
Seguro que la próxima vez disfrutarás de la gastronomía local. 🙂
Qué buen compendio de gastronomía. A pesar de su aspecto nos quedamos con el Ibu Oka de Bali, el babi guling es uno de los platos más apetitosos que hemos probado, muy bueno!. La ropa vieja de cuba con platano frito también tela marinera, qué hambre….
Un saludo a todos
Se os ve todo unos expertos en gastronomía mundial. Bali es uno de los lugares donde mejor he comido, coincido totalmente con vosotros y con Vero. Y aparte de su deliciosa cocina también destacaría la increíble variedad de frutas que hay en la isla, a cada variedad más deliciosa.
Muchas gracias por vuestro comentario.
Me gusta y quiero probarlo todo!! por ahora apunto los sitios recomendados por Vero en Bali, mi próxima parada. Excelente idea Floren. gracias por contar conmigo y encantada de estar rodeada de tan buenos blogueros 🙂
En Bali vas a disfrutar un montón con la gastronomía, al menos a mí me pareció excelente. Con las recomendaciones de Vero ya tienes restaurantes de enorme calidad en Ubud, y en el resto de la isla no son difíciles de encontrar. Disfrutad mucho del viaje, ya contarás.
Muchas gracias y un abrazo.
Menuda lista de platos y de restaurantes. Me he sorprendido al descubrir que, sin contar el restaurante de la naturaleza 😉 he estado en tres de ellos!!! pues mi meta será seguir descubriendo más.
Gracias Floren por regalarnos esta entrada, ya sabes que la voy a guardar como un tesoro
Curiosamente yo también he estado en un par de ellos, de los cuales casi no recordaba su nombre pero sí la buena impresión que me dejaron. Debo admitir que yo no soy mucho de hacer fotos a los platos que degusto pero creo que a partir de ahora voy a cambiar y me llevaré un recuerdo en imagen aparte del gastronómico en sí.
Muchas gracias a ti por colaborar.
: Qué gran selección de restaurantes y platos! y qué buena pinta tiene todo jeje. La gastronomía es, o debe ser, un pilar siempre fundamental de todo viajero y todo viaje :D. Esperando con hambre la segunda parte 😉
Totalmente de acuerdo contigo.La gastronomía es un pilar fundamental en la cultura local y quienes la evitan pierden un montón de sensaciones en su experiencia viajera. Conservo muchos buenos recuerdos asociados a experiencias gastronómicas y prácticamente ningún lugar me ha decepcionado en eso, aunque tengo mis cocinas favoritas también.
Muchas gracias por tu comentario.
Mira que comimos bien en Grecia, pero precisamente en Naxos la experiencia culinaria fue regular (elegimos mal) ¡Si hubiésemos tenido la opinión de Pepa no habríamos fallado!
Muy buena recopilación. ¡Enhorabuena!
La gastronomía griega es una de mis favoritas, sin duda. Especialmente las aceitunas, su derivado el aceite y por extensión las ensaladas con feta me encantan. En Naxos no he estado, pero seguro que Pepa no se equivoca. 😉
Muchas gracias por tu aportación.
Enhorabuena por la idea Floren! Te ha quedado un articulo de rechupete!!! Por ahí leí un nombre que suena a Haluskys…el Slovak Pub de Bratislava. El resto los tengo pendientes de probar 🙂
El Slovak House no me suena, pero uno de los tuyos sí que lo recuerdo de cuando estuve en Ubud. Ya contarás si algún día tienes una experiencia gastronómica en alguno del resto. 😉
Muchas gracias y un abrazo.