Pompeya (Región de Campania, Italia)
Bajo la sombra siempre amenazante del Vesubio, la antigua ciudad de Pompeya fue destruida por una erupción de éste en la segunda mitad del siglo I. Cubierta por completo por la lava y ceniza emitida por el volcán, quedó relegada al olvido y sus ruinas no fueron descubiertas hasta mediados del siglo XVIII. Los restos sacados a la luz en la época posterior presentaban un buen estado de conservación, aunque sufrieron daños durante los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial y hubieron de ser restaurados en parte. Se conservan el foro, centro de la actividad ciudadana, la basílica, las termas, dos teatros, el anfiteatro, numerosas residencias privadas, entre las que destaca la famosa casa del Fauno, y diversos templos. Entre éstos hay que mencionar el dedicado a Júpiter, que estaba siendo restaurado en el momento de la erupción, y el de Apolo, la edificación religiosa de mayor importancia en la ciudad.