Oficialmente denominada mezquita del Sultán Ahmet, la mezquita Azul debe su apelativo a la predominancia de esa tonalidad en su decoración interior. Fue construida a comienzos del siglo XVII por orden del sultán otomano Ahmet I y para su emplazamiento se eligió un lugar tan emblemático como el antiguo hipódromo de Constantinopla. Su situación sobre lo que fueron las antiguas gradas del circo, por consiguiente, no debió ser casual. La obra le fue encargada a Sedefkar Mehmet Ağa, principal discípulo del famoso arquitecto Sinan, y duró unos siete años. El resultado superó con creces las expectativas y esta mezquita de seis minaretes, la única junto a la de La Meca que llegaba a tanto en su época, se ha convertido por méritos propios en una de las más espectaculares del mundo.