Comienza la cuenta atrás para Rubén Albaladejo. Y esta vez no es en sentido figurado, sino real, porque mañana mismo parte junto con su pareja, Merce, de camino hacia una gran aventura en bicicleta durante al menos un año por la Ruta de la Seda y quizás Oceanía. A pesar de ser un viajero algo tardío, Rubén tiene una ilusión enorme por conocer nuevos lugares y experimentar diferentes sensaciones, habitualmente en Asia aquéllos y en contacto con la naturaleza éstas. No tiene un blog único, sino que suele hacer uno por viaje y los agrupa en Los viajecicos de Merce y Rubén, donde tiene ya acumuladas numerosas experiencias. Como no podía ser de otra manera, nos contará esta gran aventura que inicia mañana en Dos bicis sin destino, página a la que voy a permanecer muy atento durante el próximo año por lo menos. Personalmente, le tengo un gran aprecio y, a pesar de que nos vemos poco incluso viviendo en la misma ciudad, lo considero un buen amigo. Con ustedes, Rubén Albaladejo.

10. El viajero, ¿nace o se hace?

Pues la verdad es que lo desconozco, pero te puedo contar mi caso. Yo empecé a hacer viajes «serios» a los 33 años, así que mi pasión viajera ha sido muy tardía. Por España sí había viajado bastante anteriormente, primero con mis padres y luego por mi cuenta, pero viajar a lugares más lejanos y sin agencias, me parecía complicado. Mi primer viaje fuera de Europa fue a Costa Rica, mediante una agencia. Visitando el Parque Nacional de Cahuita, cuando mejor lo estaba pasando, el guía nos dijo que ya teníamos que volver a la furgoneta para ir a corriendo a otro sitio, yo me hubiera quedado mucho más tiempo por allí. En ese preciso momento pensé que tenía que volver algún día por mi cuenta, sin agencias ni ataduras; al año siguiente lo hice. Ese fue el momento clave en el comienzo de mi verdadera pasión viajera.

No recuerdo haber soñado de pequeño con grandes aventuras viajeras, ni me sabía las capitales del mundo como tú, así que probablemente pertenezco más a los viajeros que se han hecho con el tiempo.

9. ¿Vives para viajar o viajas para vivir?

Hace tres días firmé la excedencia en mi trabajo para iniciar nuestro sueño, un viaje en bicicleta que nos llevará a Merce y a mí durante un largo periodo de tiempo por Asia y quizás Oceanía, con esto creo que la respuesta está clara. Tampoco estoy obsesionado con viajar, creo que hay otras cosas en la vida, como el disfrutar de los amigos y de la familia. Quizás dentro de unos años deje de viajar y me dé por criar avestruces o hacer puzzles, quien sabe.

8. Si alguna vez te pierdes, ¿dónde no deberíamos buscarte?

Aunque pienso que el mundo es mucho más seguro de lo que nos pintan en las noticias, no viajaría a un país realmente peligroso, tipo Somalia o Afganistán, no disfrutaría y ése es el principal motivo por el que viajo.

7. Dicen que la cabra tira al monte…y tú, ¿para donde tiras?

Cada vez disfruto más de la naturaleza y menos de las grandes ciudades, que salvo excepciones, se han vuelto más iguales, las mismas tiendas, las mismas cadenas de restaurantes y los mismos centros comerciales. En esto también tiene bastante que ver que últimamente viajamos en bicicleta, y la mayoría de las ciudades no son precisamente amigables con el ciclista. ¿Te había comentado que nuestro próximo viaje comienza en Dubai? jajaja.

6. ¿Estás de acuerdo con quien afirmó que viajar, como todas las drogas, requiere un aumento constante de la dosis?

Totalmente de acuerdo. Si repasas nuestros blogs cronológicamente son un claro ejemplo de esto. Espero que nuestro próximo viaje no se convierta en una sobredosis.

5. ¿Crees que los prejuicios que suelen acompañar a quien no sale de su tierra se curan viajando? ¿O por el contrario el hecho de viajar los reafirma?

Si viajas con mente abierta, al menos se entienden mejor otras culturas. Si fuera políticamente correcto te diría que yo he curado todos mis prejuicios, pero te estaría mintiendo. Quizás cuando pase varios meses por países musulmanes te pueda contar algo más, pero creo que por mucho que viaje nunca entenderé al que trata a una mujer como un ser inferior escudándose en la religión o la cultura.

4. En tus viajes sueles volver a Asia una y otra vez, ¿podrías explicar a qué se debe esa fascinación que el continente asiático ejerce sobre ti?

Aunque esto va cambiando con la globalización, el principal motivo es la diferencia cultural con Europa, eso es lo que más me llama la atención. Luego hay otras razones como la gastronomía, los contrastes, la amabilidad de sus gentes, la seguridad y que económicamente es ideal para viajeros de bajo presupuesto. De todas formas seguro que cambiaremos de continente a la vuelta de este viaje, probablemente América del Sur que la tenemos bastante abandonada.

3. ¿Qué ventajas otorga el hecho de viajar en bicicleta frente a medios de transporte más convencionales?

Aquí te podría contar lo que dicen todos los cicloviajeros, y como no soy muy original eso es lo que voy a hacer. La principal ventaja que te da la bicicleta es libertad y autonomía. Llevamos tienda de campaña y cocina, por lo que en un momento dado puedes acampar en lugares espectaculares sin tener que depender de hoteles y reservas. Tampoco dependes de transportes públicos, ni de horarios y puedes llegar a lugares a los que no llegan otros viajeros, además es una manera muy económica de viajar. Quizás lo mejor es el contacto con la población local. Viajando en bici la gente te ve con cierta simpatía y suele empatizar contigo, y no es extraño que te inviten a comer o dormir en sus casas. Creo que así es como realmente se conoce la idiosincrasia de un país.

Son muchas las ventajas de viajar en bicicleta pero también muchos los inconvenientes, no nos vamos a engañar. Aunque ahora mismo me parece la mejor forma de viajar, me considero más viajero que ciclista, y en este viaje no me dolerá tener que dejar la bicicleta y usar otros medios de transporte si en algún momento no lo estoy disfrutando.

2. Estás a punto de comenzar el que posiblemente sea el viaje de tu vida, ¿cuáles son tus sensaciones en los momentos previos a esta gran aventura?

Solo faltan un par de días para la salir y ahora es cuando empiezan los nervios de verdad. Como sabes, llevábamos ideando este viaje desde hace unos años y hasta hace una semana estábamos sorprendentemente tranquilos.

La sensaciones son contradictorias, por una parte tengo una ilusión tremenda por empezar y por otra de tristeza al dejar por una larga temporada a los seres queridos.

1. Una que no me resisto a hacerte: ¿No vais a echar de menos el zarangollo, los michirones y los paparajotes en los próximos dos años?

Como nos conoces Floren, se nota que vives en Murcia. A ver si encontramos los ingredientes en el camino y podemos cocinar algo parecido. Creo que gastronómicamente vamos a echar de menos el embutido, es lo que nos suele pasar en viajes más cortos, aunque sin duda el mayor sacrificio, casi una tortura, será tener que olvidarnos de la cerveza durante los dos meses que pasaremos en Irán. De todas formas nosotros disfrutamos mucho de la parte gastronómica de los viajes, nos gusta probarlo casi todo y experimentar sabores diferentes, así que creo que aunque echemos de menos algunas cosas, estamos deseando probar otras.

0. Para terminar la cuenta atrás y comenzar el viaje, indícanos tus cinco lugares que todo el mundo debería visitar antes de morir

Se me queda corta la lista. Si me lo permites te voy a poner primero una lista de lo que todo el mundo debería visitar antes de morir y otra de lo que a mí me gustaría volver a visitar:

1- Cataratas de Iguazú (Argentina y Brasil)
2- Gran Cañón (USA)
3- Angkor (Camboya)
4- Bagan (Myanmar)
5- Luang Prabang (Laos)

1- Trekking Annapurnas (Nepal)
2- Isla de Flores (Indonesia)
3- Jericoacoara (Brasil)
4- Archipiélago de San Blas (Panamá)
5- Tana Toraja (Indonesia)

Espero que os vaya muy bien en esta aventura, Rubén y Merce, y que cuando volváis me la contéis en persona. Alrededor de unas Estrellas de Levante y unas tapas huertanas, por supuesto.