La cuenta atrás: Pablo (Funk House)
Comienza la cuenta atrás para Pablo (Funk House). A pesar de ser un viajero algo tardío, Pablo ha tenido tiempo suficiente para resarcirse y ya ha podido cumplir muchos de sus sueños. Apasionado de Asia, especialmente de Japón, cuenta algunas de sus andanzas en el blog Funk House, aunque se prodiga poco, por desgracia para quienes admiramos su estilo claro y directo así como su gran manejo del lenguaje. No tengo la suerte de conocerlo personalmente aún, pero siempre me ha parecido una de las personas más inteligentes y sensatas en este entorno de viajeros que transmiten sus experiencias de una manera u otra. Y, como puede deducirse de esta entrevista, no tiene pelos en la lengua en absoluto. Con ustedes, Pablo (Funk House).
10. El viajero, ¿nace o se hace?
No me atrevería a contestar esta pregunta con blanco o negro, pero en mi caso creo que ganaría rotundamente el «se hace». Por circunstancias personales, yo empecé a viajar muy tarde, figúrate que hasta los 29 no pisé un avión…. eso sí, una vez lo probé me enganché y casi no he parado desde entonces, igual tenía un gen viajero latente que estaba esperando despertar…
9. ¿Vives para viajar o viajas para vivir?
¿Sabes el dicho de la pescadilla que se muerde la cola? Pues mira, yo me dedico a vender y gestionar viajes; con lo que gano, vivo y viajo, y gracias a mis viajes, adquiero unos conocimientos que me permiten ser más profesional en mi trabajo, lo que se traduce en más y mejores ventas que me ayudarán a poder seguir ganando el dinero que me voy a gastar en mi próximo viaje, y por supuesto, vivir un poco mejor ¿Lo has entendido? Yo tampoco xD.
Bromas aparte, al margen de mi profesión, te puedo decir que hay gente que no puede vivir sin sus cañitas al salir del trabajo, conducir vehículos caros o estar renovando continuamente su vestuario, por no mencionar la hinchada de cualquier deporte, pero para mí nada de eso importa si me puedo seguir permitiendo al menos un viaje largo al año. Lo que venga después, ya es un bonus….
8. Si alguna vez te pierdes, ¿dónde no deberíamos buscarte?
Aquí me lo pones difícil. No te sabría decir por la sencilla razón de que no le hago ascos a nada, hasta con un par de cruceros me he atrevido y todo. Pero, por otro lado, aunque no me gusta decir de este agua nunca beberé, hay dos tipos de viaje en los que a día de hoy pondría a la cola de mi lista de deseos viajeros:
1. La típica estancia en la costa, ya sea en Levante, Andalucía o el Algarve ¿El motivo? Pues que nací y me crie en Altea, me formé en Valencia y actualmente trabajo en Benidorm. Para mí sería un simple más de lo mismo, pero que quede claro que no critico a quien lo disfrute, tan sólo me rechinan ciertos viajeros pro que tanto se burlaban de quienes practicaban esta forma de hacer turismo, y ahora de repente les invita tal hotel o cual oficina de promoción turística a pasarse una semana tirados a la bartola y lo abrazan con toda su jeta llamándolo slow travel…
2. Un viaje en grupo. No lo soporto, primera por deformación profesional (he trabajado tantos años como guía llevando a otros, que no concibo verme al otro lado del rebaño) y segunda y más importante, por mi propia personalidad individualista: cuando viajo con otras personas, no soy precisamente amigo del «cuantos más mejor». Y eso sin mencionar que también viajé solo en alguna ocasión y me fue genial. Pero justo es reconocer que un viaje en buena compañía puede ser insuperable, aunque lo difícil sea encontrarla.
7. Dicen que la cabra tira al monte…y tú, ¿para donde tiras?
Cada vez que conozco un destino nuevo se me hace más difícil decidir cuál es el que más gusta de todos, casi siempre hay algo especial en ellos que me crea avidez por regresar el mismo día en el que me voy, pero creo que es del dominio público que tengo una gran debilidad por Asia en general, y por Japón en particular. La primera vez que aterricé en el archipiélago del sol naciente, me asaltó la emoción de haber hecho realidad mi sueño más inalcanzable; la segunda, fue la felicidad de haberme reencontrado con un querido amigo y en la tercera, directamente me sentí como regresando a casa. Figúrate que ya estoy planeando un cuarto viaje….
6. Cuando decides hacer un viaje, ¿eliges tú el destino o dejas que el destino te elija a ti?
Exceptuando los viajes relacionados con mi trabajo, normalmente siempre soy yo (con el consenso de quien me acompañe) el que elige el destino. En muy contadas ocasiones es el destino quien me elige a mí, bien por una oferta imposible de rechazar (un vuelo a Londres por 10 € , otro a París por…. ¡¡2 €!!), bien por forzosos cambios de planes, como aquel estresante año 2011 en el que nuestras vacaciones se vieron afectadas a causa del catastrófico Gran Terremoto del Este de Japón, que provocó que tuviésemos que cambiar los billetes para viajar a Tailandia, y a dos días de partir, las peores inundaciones que sufrió el país en años volvieron a trastocar nuestros planes y terminamos aterrizando en Camboya.
5. ¿Crees que los prejuicios que suelen acompañar a quien no sale de su tierra se curan viajando? ¿O por el contrario el hecho de viajar los reafirma?
Depende de la persona. Cada caso es un mundo aparte, si tienes la mente abierta, viajar lejos te ayuda mucho a entender que no en todas partes se vive como aquí, y lo más importante, que no somos mejores ni peores. De todos los sitios siempre puedes aprender algo que te ayude a crecer como persona, o por lo menos a adquirir más experiencia y conocimientos. A mí por ejemplo me marcó la gente de Camboya, tanto que creo que no soy el mismo después de haber pasado por allí; durante nuestro viaje fuimos testigos de un accidente de tráfico con víctimas y nos afectó tanto como si le hubiese ocurrido a un familiar nuestro. Pero luego tienes la otra cara de la moneda, como he comentado antes trabajé como guía y acabé harto de las personas que se pasaban todo el viaje comparando con su lugar de origen y lamentando lo que se habían dejado en casa (especialmente la gastronomía), y eso sin mencionar a los del «yo no voy a ver miseria». Yo nunca entenderé por qué ese tipo de personas malgastan su tiempo y su dinero viajando.
4. ¿Estás de acuerdo con quien afirmó que viajar, como todas las drogas, requiere un aumento constante de la dosis?
Aquí sólo te puedo dar un sí rotundo, al menos en lo que a mí respecta. Mi problema es que no me conformo con aumentar el número de viajes: cada vez tienen que ser más largos, más lejanos, más atípicos, más exigentes conmigo mismo, más exóticos, más…. todo. En 2010 no salí de Europa y aunque tuve una par de escapadas, realmente sufrí una suerte de síndrome de abstinencia muy frustrante. Por suerte, a partir del año siguiente volví a recuperar el ritmo y aquí me tienes, deseando que no pare…
3. ¿Qué opinas de esas asociaciones de viajeros de nombre tan anglosajón y cuyos miembros en buena parte desconocen la lengua de Shakespeare?
¡Pido el comodín de la llamada telefónica! Bueno, vale, no me escaquearé, pero antes que nada quisiera matizar algo: de esas asociaciones que comentas, conozco algunas que están bastante bien, como también sé de otras que a mi juicio no lo están tanto pero por lo menos entre sus asociados hay algunos pocos miembros cuyas aportaciones sí merecen la pena.
Dicho esto, podría hacer una disertación sobre cómo la unión varios blogs mediocres nunca puede dar como resultado una web digna de visitar, pero dado que yo mismo considero que la relevancia de mi propio blog es prácticamente nula, mejor me abstengo de seguir con el tema. Con respecto a ponerse un nombre internacional, yo mismo lo hice con mi pseudónimo (que luego además dio nombre a mi web) y no soy el más indicado para criticarlo, pero sí que considero que lo ideal sería quien recurriese a utilizar un título en inglés, tuviese al menos un mínimo conocimiento del idioma, más que nada para que su blog no acabe siendo el Bar Reinols de Mauricio Colmenero.
2. A pesar de que (lamentablemente) tu blog pasa mucho tiempo en standby ¿Venderías tu integridad bloguera por un plato de lentejas? Por ejemplo, hablando maravillas de sitios que desconoces o a los que nunca viajarías a cambio de plaza en un blogtrip
Ay los blogtrips…. el daño que están haciendo a la blogosfera y aún no se han dado cuenta. Yo distingo entre tres clases de blogueros: 1) quienes contamos nuestras experiencias por el mero placer de compartirlas, 2) los blogueros profesionales que viven de ello (o reciben un sobresueldo), ya sean periodistas titulados o bien viajeros avispados que han encontrado la fórmula para lucrarse con su hobby, y 3) los listillos que se autodenominan influencers (¿lo he escrito bien?), que no contentos con alimentar su vanidad dirigiendo a las personas sin criterio dónde y cómo tienen que viajar, centran sus esfuerzos en conseguir ese ansiado viaje promocional que han visto con envidia cómo aprovechaban otros blogueros más espabilados.
Si tú estás voluntariamente en el tercer grupo y además eres consciente de ello, es obvio que utilizarás todas las armas que tengas a tu alcance para conseguir tu meta, que es viajar gratis, pero en el momento que lo haces, estás prostituyendo tu obra y de paso comprometiendo tu credibilidad. Dada la nula repercusión de mi blog, dudo mucho que me regalen nunca un blogtrip de esos, aunque sí que te puedo decir que me invitaron a varios famtrip que viene a ser lo mismo pero destinados a los profesionales del turismo, y la verdad, no me he visto nunca obligado a corresponder el favor recibido (aunque tengo que confesar que en agradecimiento me hice eco de uno de ellos en mi web). En resumen, y con esto lo dejo ya, a día de hoy tengo la suerte de poderme permitir viajar más o menos donde quiera y cuando quiera, por lo tanto no necesito que me sobornen con nada. Y en caso de que no fuese así, tampoco creo que me metiese en el ajo, no se me da nada bien hacer la pelota a nadie. Y síííííí, capto la indirecta, a ver si me pongo las pilas de una vez, termino los dos diarios que dejé a medias, escribo los de los cuatro viajes que vinieron después y como postre suelto alguna perlita de las mías.
1. Hace poco leí a alguien que afirmaba que algunos blogs de viaje se están acercando tanto al sol que se están empezando a quemar. ¿Crees que un exceso de patrocinio y de blogtrips va en detrimento de la calidad del contenido?
Me alegra que me hagas esta pregunta, porque hace años que vengo pensando en esto, y espero que me permitas mi propia reflexión sobre lo que ha supuesto la Web 2.0 a un nivel general, no sólo la relacionada con los viajes.
Desde que internet se convirtió en un medio interactivo en el cual todos podemos aportar nuestro granito de arena, hemos visto cómo auténticos don nadie alcanzaban una fama sin precedentes, hasta entonces sólo destinada a quien salía en la teúve o en las revistas del corazón. No tienes más que entrar en cualquier foro o red social y ver cómo ciertos personajes cuya vida analógica podríamos tachar de anodina, disfrutan de una segunda personalidad digital que les aporta un nutrido grupo de seguidores (el club de fans o la cuchi-pandi de toda la vida) dispuestos a reírles las gracias o dejarse llevar por sus opiniones. Estas celebrities del siglo XXI, en un momento dado se pueden llegar a sentir oprimidas dentro de un espacio (el foro) que en el fondo no deja de ser la casa de otro, y al final, terminan creando así su propio reino (el blog) para así poder seguir expandiendo sus inquietudes megalómanas. En otros casos se da el proceso inverso, y tenemos quien ya tiene un blog sin apenas repercusión y se mete a colaborar en los foros para promocionar su creación y así aumentar sus visitas.
Huelga decir que estoy generalizando salvajemente y que hay otros muchos ejemplos que pueden contradecir a estos dos, pero he querido mencionarlos porque últimamente no puedo evitar fijarme en que hay muchas personas que parece que vivan en la red y tengan la imperiosa necesidad de dejar su huella en el ciberespacio, ya sea en los citados foros, en sus propias webs, o en los comentarios de los blogs comerciales de más repercusión. ¿Conoces el dicho aquel que reza el sabio habla porque tiene algo que decir, mientras que el necio habla porque tiene que decir algo? A mí me viene a la mente muy a menudo cada vez que me conecto a internet, hay muchísima gente necesitada de decir algo. Yo mismo estuve atrapado en esa espiral hace unos años, y no te puedes imaginar la liberación que sentí al salir de ella.
Después de leer el rollo que te acabo de soltar, me he dado cuenta que me has preguntado una cosa y te he contestado otra, aunque en el fondo me sirve como introducción al verdadero quid de la cuestión. Aunque te puedo enumerar varios blogs puramente comerciales estupendos y otros en plan amateur pero que tienen cierto ánimo de lucro y aún así no dejan de ser muy recomendables, sí creo que hay blogs a punto de arder. Bien por el ansia de fama, bien sea por conseguir unas perrillas o unas vacaciones gratis, hay gente capaz de todo y tarde o temprano la calidad de su obra queda muy comprometida por ello. Creo que de eso ya he hablado largo y tendido en la pregunta anterior, ¿no? Pero por suerte para nosotros los internautas, aunque son los que más ruido hacen, no dejan de ser una minoría; por cada blog que conozco (que no sigo) a punto de salirse de la órbita, disfruto al menos de diez o veinte que siguen siendo fieles a los principios de quien los creó. Y al final, esos son con los que me quedo. El tuyo uno de ellos 😉
0. Para terminar la cuenta atrás y comenzar el viaje, indícanos tus cinco lugares que todo el mundo debería visitar antes de morir
No me gustan mucho los rankings, y menos después de que un descerebrado tuviese la osadía de repudiar uno de mis sitios preferidos de Japón, Fushimi Inari, tan sólo porque no aparecía en el top ten de las guías de viaje. Aún así voy a mojarme un poco, pero quiero ser coherente con mis principios y me limitaré a los sitios que ya conozco, que por desgracia no son tantos como querría.
1.Japón, por supuesto. Preferentemente durante la floración del cerezo o cuando los arces se tiñen de rojo a finales de Noviembre. Pero ahora que ya lo conozco en persona en esas dos facetas, tampoco me molestaría en absoluto viajar en invierno para disfrutar de sus paisajes nevados en invierno o de sus vistosos festivales en verano. Y si me preguntaras por mi rincón japonés preferido, te diría que la isla de Itsukushima (Miyajima), a ser posible pernoctando allí. Y sí, ¡Fushimi Inari también!
2.Nueva York. Para mí es LA CIUDAD. Ya lo puse en mi blog varias veces y muy posiblemente te lo hayan dicho ya antes, a mi juicio es la capital del mundo occidental de finales del siglo XX y de momento lo que llevamos de siglo XXI, del mismo en el que Roma lo fue hace 2000 años, Grecia unos cuántos más y Egipto en una época muy lejana. Siguiendo en Estados Unidos, San Francisco también me gustó mucho, pero tengo que reconocer que los agrestes paisajes de Utah y Arizona me robaron el corazón cuando estuve deambulando por el Oeste.
3.Camboya. A quien fuese a visitar el país de los khmer, le recomendaría dejar atrás los miedos y los prejuicios y no limitarse a lo fácil que son los templos de Angkor. Nosotros por un capricho del destino, nos vimos obligados a ampliar nuestra estancia y gracias a ello pudimos conocer Battambang y hacer una larga travesía en barco por el río Sangker y el lago Tonlé Sap. Y, ¿sabes qué? Nos dejó con ganas de volver para visitar el resto del país. Y para quien vaya solamente a Angkor, que es una opción tan válida como cualquier otra, que no se pierda Beng Mealea, me lo recomendó una amiga y nunca le estaré lo suficientemente agradecido.
4.Te diría que Tailandia, conociendo solamente Bangkok, Phuket y las islas Phi Phi. Aún así me gustó tanto lo poco que vi que no tengo ningún problema en ponerlo en esta lista. De todos modos, lo voy a remediar pronto y si me vuelves a entrevistar en el futuro, podré hablarte del resto del país.
5.Aquí iba a poner algo de Vietnam, como Hoi An, Sa Pa o Tam Coc, ya te dicho que tiro mucho para Asia, pero al final la nominación se la va a llevar París, y lo voy a hacer por algo muy subjetivo como es el buen recuerdo que tengo de la ciudad, de todos los trabajos que hecho como guía es el destino que más alegrías me ha dado, por muchas razones personales que no viene al caso mencionar, aunque sí que quiero citar una: el escalofrío que me dio la primera vez que vi la Torre Eiffel a lo lejos, desde la autopista A6 a su paso por Orly cuando yo no era más que un mozalbete imberbe que nunca había salido de casa.
Si tú lo dices, tendré que visitar Nueva York algún día, Funky.
¡Hala qué fuerte, estamos de verdad en las ondas! Me siento como la típica persona que ve por primera vez una cámara de la televisión enfocándole y no sabe cómo reaccionar, je, je, je! Muchas gracias Floren por esta oportunidad y haberte acordado de mí, poniéndome al menos por un día a tu altura y a la del resto de interesantes personas que estás entrevistando.
Un abrazo
Muchas gracias a ti por colaborar. Espero que la entrevista te haya hecho pasar un buen rato y que te sirva para relanzar tu blog, que puede tener un gran éxito.
Un abrazo.
Encantada de conocer a Pablo!
Me alegra habértelo dado a conocer, Maria Teresa. Me parece una persona realmente interesante.
Un abrazo.
Tengo el tremendo honor de ciber-conocer a Pablo desde el año 2008 cuando comenzó a planear al milímetro su viaje a Japón. Pocas risas que nos echamos entonces y me reconozco una enganchada de sus diarios. Como dices Floren, una pena que no le dedique tiempo a sus relatos aunque comprendo lo que dice sobre la «liberación bloguera y forera». Me ha gustado mucho leer su opinión. Un abrazo a los dos.
Pablo es todo un crack. Yo también lo conozco virtualmente desde hace años y siempre he pensado que tiene mucha personalidad y es muy inteligente. Además es un gran viajero, que más se puede pedir.
Un abrazo.
cuarta vez??? O.O la envidia que le tengo ahora mismo…jajaja estoy loca por volver a Japón xD (por cierto, por ahora compartimos lugares preferidos!! Miyajima durmiendo allí es preciosa)
Me da que voy a trasladarme a su blog a buscar info para cuando vuelva ^_^
Unas respuestas muy claras, por cierto!
Habláis tanto de Miyajima que voy a tener que volver a Japón tan solo para ver este lugar. Y, por supuesto, quedarme a dormir allí. 🙂
Muchas gracias por tu aportación.
Otra aportación muy interesante, sobre todo porque creo que es el primer entrevistado que es profesional del mundo del turismo y habla con conocimiento de causa de algunas cosas que es mas difícil ver desde fuera.
Ah, y con respuestas extensas, que siempre se agradecen. A mi siempre me ha gustado eso de que te hagan una pregunta y tu respondas a otra cosa pero que dicha respuesta valga tanto o mas 🙂
En el viaje a Japón que hice este anho (quinto para mi, pero quizás tiene menos merito) vino mi familia (mi madre, mi tía y mi tío). Lo que mas les gusto? Fushimi Inari, seguido de Nara y el paseo en el Yurikamome de Tokyo.
Yo, si hay algo que recomiendo cuando me preguntan por Japón, es pasar la noche en Miyajima. Se ve de otra manera.
Enhorabuena a ambos
Un gran apunte, Enepi. El hecho de ser profesional del turismo diferencia a Pablo un tanto del resto de los entrevistados hasta ahora. Aunque a pesar de no serlo yo, coincido bastante con su opinión sobre los blogtrips.
Decididamente voy a tener que volver a Japón para visitar Miyajima y también Fushimi Inari, que tampoco lo visité cuando estuve por Kioto. Algo imperdonable, lo sé. 🙁
Un abrazo.
No tan imperdonable Floren. Yo no fui hasta la cuarta visita, aunque repetí en la quinta. Al haber ido ambas veces con Sakura no he podido subir hasta arriba del todo, que es una tirada.
No muy lejos está Uji, con el templo PdH que sale en las monedas de 10 yenes y mucho menos visitado que los de Kyoto.
Un abrazo
La verdad es que cuando fui a Kioto no tenía demasiada información sobre los templos, entre tantos donde elegir. Solo tenía claro que quería ver Kinkaku-ji y Ryōan-ji por su jardín zen, y esos fueron los que visitamos más algún otro como Ninna-ji.
De todas formas, Kioto es una de esas ciudades a las que hay que volver, y ya hasta mi hijo pequeño me dice que quiere ir a Japón (al contrario que su hermano, él no ha estado), así que…:-)
Un abrazo.
¿Sabes la gracia que tiene Miyajima? Cuando se viaja a Japón por primera vez, lo normal es seguir la misma ruta que tiene todo el mundo (Kyoto, Tokyo, Nara, Nikko, etc) y si tienes la acertada decisión de quedarte a dormir allí, o por lo menos quedarte hasta que anochezca, en el momento que se van todos los turistas y te quedas prácticamente solo a disfrutar los encantos de la isla con la única compañía de los ciervos que deambulan libremente por sus calles, es uno de los pocos momentos de tu viaje en los que te sientes realmente afortunado de estar allí. Mi ejemplo es muy claro; en mi primer viaje visité la isla durante el día, y aunque fue una de las cosas que más me gustaron, nada que ver con el segundo, durmiendo allí y disfrutando como enanos de los paseos que nos dimos por la noche y a primera hora de la mañana.
Para los japoneses, desde allí puedes ver una de las tres vistas más bonitas del país. Yo creo que tal vez haya sitios incluso más maravillosos, pero para eso hay que salirse de las rutas típicas y es lo que espero hacer en mi próximo viaje, que tardará un poco, pero si me sale como yo pretendo que salga va a ser toda una experiencia.
Fushimi Inari es muy fácil de visitar (lo digo para que te animes a la próxima xD), está a 5 minutos en tren desde la estación de Kyoto, no cierra por la noche, es gratis…. ¿qué más se puede pedir? Y si no tienes tiempo o ganas de verlo entero, la parte más llamativa que es el pasillo de torii la tienes justo a la entrada 😉
Muchas gracias por tu detallada explicación.
Desde luego ya tengo muy claro que cuando vuelva a Japón haremos noche en Miyajima (mis hijos fliparán con los ciervos, como ya lo hizo Dani con los de Nara) y Fushimi Inari será uno de los primeros lugares que visitaremos en Kioto. Y, por supuesto, para el resto de sitios que ver (uno de ellos Hakone, donde tampoco estuve) buscaré información en tu página.
Un abrazo.
Una entrada genial! Gracias por compartirla!!
un saludo especial
Zalman
Muchas gracias por tu aportación.
Gracias a ti! Siempre abierto por estos lados…
Soy adicta a estas entrevistas. Con FunkyHouse me preparé el viaje a Nueva York y a lo mejor pronto lo tomo como referencia para otro.
Muy buenas respuestas, hemos coincidido en algunas 😉
Me alegra que te gusten, algo que según me han comentado no es demasiado habitual entre los blogueros de viajes. Espero seguir con ellas, a ver si la gente se sigue animando a participar.
Muchas gracias por tu comentario.
Olé ese Pablo!! muy buena entrevista. Pablo y yo nos ciberconocimos hace años en un lugar del ciberespacio de cuyo nombre no quiero acordarme, je je. He hablado con él mucho de Japón (aunque no haya logrado ir aun), de Tailandia, de Nueva York y del Oeste Americano…buenísima persona, dispuesta y divertida, espero que no tardemos mucho en echar una caña de las de verdad. Me ha encantado la entrevista y estoy totalmente de acuerdo con sus respuestas. Felicidadessss a los dos!!
Creo que tengo cierta idea de cual es ese lugar al que te refieres, Calíope. Grandes viajeros había por allí, aunque uno tras otro fueron saliendo, como no podía ser de otra manera.
A ver si echas esa caña con Pablo antes de que vayas a Japón y a ver si yo también puedo unirme, que tengo muchas cosas que aprender de vosotros.
Muchas gracias por tu aportación y un abrazo.
Bueno Floren, que sepas que tu entrevista me ha animado tanto las visitas del blog que no he podido evitar publicar un par de entraditas, una de ellas ampliando lo que pienso de los blog-trips…. Y en la otra casi vendiendo mi alma al diablo, promocionando un poco la empresa en la que trabajo jajajaa, esto me pasa por hablar. Y de paso le he dado un pequeño lavado de cara que espero te guste.
Vero C: no voy a decir nada que no se sepa ya, jajaja, el día menos pensado Paco nos pilla celos. Ardo en deseos de que coincidamos de una vez por todas por ahí. Lo que daría por estar ahora contigo en cualquier mercado de Asia 😀
M.Teresa: el gusto es mío 😉
Viajar Code: Verónica: sííí, tres y espero que pronto llegue el cuarto! Entre el primero y el segundo pasaron cuatro años, pero luego entre el segundo y el tercero sólo seis meses, cosas de la vida. Aunque por desgracia en el blog sólo encontrarás info del primero (y a medias), espero poderlo remediar más pronto que tarde.
Enepi: gracias por tus palabras, a veces me paso de rollero y me creo que estoy aburriendo al personal. Quien me conoce sabe que me gusta contar las cosas con pelos y señales jajaja! PD: Oohhhhh la Yurikamomeeee! Me pasaría todo el día recorriéndola Odaiba dentro / Odaiba fuera, el día menos pensado me pillo el pase diario y lo hago jajaja
Zalman: muchas gracias, tomo nota de tu recomendación
Libreta Viajera: qué alegría me has dado con lo de Nueva York, no si al final resulta que me leéis y todo! Un abrazo
Caliope Viajes y Vivencias: Pepaaaaa, te digo lo mismo que a Vero, nos toca quedada ya de una vez!! Aunque sea por aquí cerca! Besos guapa.
Hola!
Diría tantas cosas q no sé por donde empezar! 🙂
A Pablo lo conozco muchísimos años y hemos tenido conversaciones larguísimas d viajes … Subscribo todo lo q dice … #ylosabe jajaja
Me he sentido representada al máximo, pero dos cosas he pensado … Cuánta razón! 1. En los tipos d viajes q no le gustan, yo tb soy solitaria o asocial jajaja, con mi pareja y ahora mi bebé … Nadie más. Comprobado y 2. Añadiría los cruceros, aunque sé q él ha hecho varios …
Respecto a q si viajar es una droga … Lo es. Afortunadamente he viajado desde bien joven, aunque pienso q he viajado desde q nací porque mis padres tb eran viajeros emperdernidos y allí q íbamos todos, pero para mi el impass fue a los 17 cuando viaje sola, sin ellos, lejos, por primera vez. Estoy contentisima d no haber parado desde entonces ni un momento. Si es cierto q el ritmo ha bajado por varias circunstancias pero mis dos escapadas al año no me las quita nadie por que si no muero. Hubo un tiempo que no asimilaba q mi ritmo tenia q bajar por circunstancias o bien económicas o familiares y lo llevé muy mal pero ahora pienso q ya vendrán tiempos mejores y podremos volver a disfrutar d los viajes a larga distancia. D momento disfruto d mi bebe cerca d casa, explorando lo q siempre dije … Cuando tenga un hijo ya m qdare por aquí. Y así ha sido. Con 3 meses ya íbamos dando tumbos. En España, pero inculcando q viajar es lo mejor del mundo.
Mi ranking:
1. Cuba, pq me enamoró. Pero no la Cuba d hotel … La d las casas, la que compartes su día a día y conoces su realidad.
2. NY. La ciudad, como dice Pablo
3. Egipto. Uno debe conocer esa cultura.
4. Grecia. Espectacular.
5. Ya os dejo elegir, cualquier capital europea … M da igual. M gustan todas.
Pablo, de 10. Enhorabuena! Un beso!
Anna qué raro se me hace hablarte en castellano, ja, ja, ja! Tu ranking ya me lo sé de memoria desde hace eones, lo de Cuba en las casas de acogida por vuestra culpa cada vez me llama más. Cuando repitáis avisadme que me apunto al bombardeo…. ¡nos vemos en María la Gorda, jajaa!
PD: este mes hace un año que no nos vemos, a ver si montamos algo ya.
Con tu bebé puedes viajar sin ningún problema, Anna. Y si necesitas algún tipo de consejo, hay muchos viajeros con niños por aquí que te podrán contar su experiencia. Yo pensaba más o menos lo mismo que tú y mis hijos ya son todos unos expertos viajeros a su todavía corta edad.
De tu ranking he visitado todos los sitios, excepto Nueva York, y como le dije a Pablo tengo que ir algún día, aunque en principio es una ciudad que no me atrae en exceso.
Muchas gracias por tu detallado comentario.