MESOPOTAMIA (Turquía)
ÉUFRATES, inseparable hermano del Tigris
ŞANLIURFA, la gloriosa Urfa
GÖBEKLI TEPE, una historia de 10.000 años

Leyendo estos varios nombres en mayúscula, ya imaginaréis qué difícil me resulta hoy dejar un único titular para tanta importante e interesante geografía visitada sobre la que contar y mostraros nuevamente. Hay algunas jornadas viajeras que inevitablemente son para recordar y enmarcar. Estas viajadas por prósperas e históricas tierras, con importantes lugares a visitar y situadas entre dos famosos cauces de agua, ya serán unas de ellas.

Comienzo nombrando el Éufrates, ese río bíblico y mítico que junto a su hermano el Tigris configura el mapa de Mesopotamia, la tierra entre ríos. Yendo en bus desde Gaziantep a Şanlıurfa lo vería y cruzaría por primera vez, ya que aunque viajando hace unos años por el norte de Irak si había conocido la cuenca fluvial de su gemelo el Tigris, a éste todavía no había tenido la oportunidad de presentarme. Quizá por esa pasión viajera que aún se lleva dentro, creo que estaba un poco nervioso por llegar a verlo y, sobre todo, al cruzarlo viajando hacia el Este, ya iba pensando en la gran historia que también esconde esta Mesopotamia turca.

Más adelante en el viaje, unos kilómetros antes de llegar a Şanlıurfa, leo sobre esta ciudad y sus curiosos nombres. Y es que a la por todos conocida por Urfa, un buen día, las autoridades decidieron concederle, por los méritos y éxitos defensivos de sus habitantes, el prefijo de Şanlı, que no quiere decir otra poca cosa que gloriosa. Pero mucho antes de llamarse así quizá tenía un nombre más bonito. En España puede que enseguida nos suene a una marca de electrodomésticos del grupo Fagor, pero mucho antes de las lavadoras y los lavavajillas de Mondragón ya existía esta histórica ciudad de nombre Edesa.

Bueno, y finalizo contando a todos un poco de la no poca historia de un cercano lugar que tuve oportunidad y ya muchas ganas de visitar llamado Göbekli Tepe. Al viajar este año por las británicas islas Orcadas, Shetland y Hébridas os comentaba la antigüedad de unos 5.000 a 7.000 años de varios lugares de enterramiento y antiguas poblaciones que eran mucho más viejas que las famosas Pirámides egipcias, pero es que el yacimiento arqueológico de Göbekli Tepe está datado con aproximadamente unos 11.000 años. Para entender la cantidad de tiempo que tienen estas piedras tenéis que llegar a imaginar que aún no había nacido Jordi Hurtado y tampoco existía Cifras y Letras. Dicho esto, ya podemos decir que es el santuario más antiguo del mundo encontrado hasta ahora.

Techado por una moderna y bien diseñada cubierta que lo protege de las inclemencias climatológicas, como la abundante lluvia con la que me recibiría para visitarlo, cuando te acercas a ver esos pétreos restos con forma de T, también «Te» das cuenta de que posiblemente fueran más un protector santuario cercano a donde sus pobladores dejaran los restos de sus muertos expuestos a los buitres u otras rapaces que harían su trabajo como en otras conocidas zonas de zoroastras de India o Irán, como la ya visitada hace un par de décadas ciudad iraní de Yazd y sus intimidantes Torres del Silencio.

Finalizo con la más reciente hipótesis abierta por los estudiosos del más allá de los tiempos, de que la edad del hombre no cazador, el que ya se asentaba en lugares con trabajos agrícolas o ganaderos, pudiera haberse dado en esos ya lejanos 10 u 11 mil años en que en Göbekli Tepe se empezaba a construir este religioso emplazamiento, con tiempo, paciencia y casi seguro, con una infraestructura de tribus menos nómadas de lo que se creía hasta su descubrimiento.

Pasando noche en otro modesto, pero vistoso y acogedor, Otel Konağı de Şanlıurfa, donde una habitación la puedes regatear en unas 300 liras turcas (15 euros) y con desayuno, descansaría para seguir ruta hacia otra muy importante y vieja ciudad de Mesopotamia y el actual Kurdistán turco.