Fuerte de San Felipe del Morro (San Juan, Puerto Rico)
Erigido sobre un promontorio que se adentra en la bahía de San Juan de Puerto Rico durante la primera mitad del siglo XVI, el fuerte de San Felipe del Morro constituía la primera línea defensiva de la ciudad. A lo largo del tiempo sufrió asedios constantes, entre los que destacan el del pirata británico Drake a finales del siglo XVI y el del holandés Hendricks apenas tres décadas más tarde. No obstante, ambos fracasaron en el intento, aunque los holandeses se encargaron de destruir la ciudad a pesar del empeño defensivo del gobernador Juan de Haro. Con el tiempo, El Morro fue perdiendo relevancia aunque su uso se prolongó incluso hasta la infausta Segunda Guerra Mundial, cuando fue utilizado como refugio subterráneo.