Estructurado en torno a tres plazas, el centro histórico de Sibiu es uno de los mejor conservados de Transilvania. Piaţa Mare es la de mayor tamaño y concentra a su alrededor características edificaciones que presentan pequeñas ventanas en sus tejados a la manera de ojos. Asimismo, se encuentran en ella algunas de las construcciones más llamativas de la ciudad, como el Palacio Brukenthal, que alberga una de las colecciones artísticas más importantes de Rumanía, y la iglesia católica de la Santísima Trinidad. También se asoma a ella Turnul Sfatului, o Torre del Concejo, quizás el edificio más emblemático de Sibiu, que da paso a la denominada Piaţa Mică, situada al otro lado. Algo más alejada se encuentra Piaţa Huet, donde se halla la catedral luterana de Santa María, templo medieval construido en estilo gótico. En el resto del casco histórico destaca la catedral ortodoxa de la Santísima Trinidad, basílica neobizantina construida en la segunda mitad del siglo XIX.