Centro histórico (Ávila, Castilla y León)
Completamente rodeada por una muralla en excelente estado de conservación, la ciudad vieja de Ávila constituye el núcleo monumental de la población abulense. En su interior se cuentan numerosos palacios y casas señoriales, entre los que destacan el Palacio Episcopal, el palacio de los Rengifos y la casa del Cordón. Diversos conventos e iglesias componen la arquitectura religiosa del interior del recinto amurallado, entre los que sobresale la catedral del Salvador, cuyo ábside se encuentra adosado a la muralla. Completan el centro histórico una serie de templos localizados extramuros, entre los que hay que mencionar las iglesias de San Pedro, San Andrés y San Nicolás, todas ellas de estilo románico; la magnífica Basílica de San Vicente, asimismo románica; y el convento de la Encarnación, donde Santa Teresa de Jesús ejerció como monja y como priora.