Conocido en tiempos romanos como cabo de Venus, debido a un templo que se erigió en honor a esta diosa en el vecino cerro de la Testa, el cabo de Gata se interna en el Mediterráneo al sur de la provincia de Almería. Su denominación actual proviene de una contracción del término ágata, mineral con abundante presencia en este lugar en el pasado. En la actualidad se encuentra protegido dentro del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar y, junto con su zona adyacente, está declarado Geoparque y Reserva de la Biosfera por la UNESCO. La zona acuática inmediata está protegida como Reserva Marina. Todo este valioso espacio natural presenta un paisaje considerablemente árido debido a la escasa pluviosidad, aunque lo caracteriza una indudable biodiversidad que incluye diversos endemismos. En él se esconden diversas playas, entre las que sobresalen la de Mónsul, la de los Genoveses y la de los Muertos. Resulta destacable también el faro de cerca de veinte metros de altura, construido a mediados del siglo XIX, que corona el cabo.