Basílica de San Nicolás (Trnava, Eslovaquia)
Ciudad de larga historia, Trnava acumula un abundante número de edificaciones religiosas y es conocida como la pequeña Roma o la Roma eslovaca, denominación a la que también contribuye el origen romano de la villa. Entre las numerosas iglesias que conserva destaca indudablemente la Basílica de San Nicolás, que muestra al visitante unas imponentes torres gemelas. Construida a finales del siglo XIV, se trata de un templo de origen gótico, algo habitual en la población. Con el tiempo fueron añadiéndose algunos elementos barrocos que dieron al edificio un aspecto aún más grandioso, aunque quizás un tanto excesivo. Durante casi tres siglos fue sede del arzobispado de Esztergom, hecho que remite al pasado húngaro de esta localidad que actualmente forma parte de Eslovaquia.