Renombrado por haber servido de modelo para el famoso Arco de Triunfo parisino, el arco de Tito glosa las hazañas del emperador romano homónimo en sus campañas contra los judíos. Fue construido en el año 82 de nuestra era por encargo del emperador Domiciano, quien pretendía honrar la figura de su hermano, el mencionado emperador Tito, fallecido un año atrás. Está situado en la romana Via Sacra y tiene un solo vano, de unos ocho metros de altura por los más de quince que tiene el arco triunfal al completo. Está recubierto por mármol procedente del Monte Pentélico y entre los diversos bajorrelieves que lo adornan destaca el situado sobre el pilar meridional. En él unos soldados portan la menorá, o candelabro de los siete brazos, como alegoría de la destrucción del Segundo Templo de Jerusalén por parte de las fuerzas imperiales comandadas por el futuro emperador Tito.