Ámsterdam (Provincia de Holanda Septentrional, Países Bajos)
Famosa por sus canales, que se ponen especialmente de manifiesto en la zona conocida como Grachtengordel, Ámsterdam es la capital de los Países Bajos, estado europeo al que frecuente y erróneamente se denomina Holanda. La población fue fundada alrededor del siglo XIII, aunque entonces era una aldea donde vivía un reducido número de pescadores. Tras la guerra de Flandes, que concluyó con la independencia de los Países Bajos en el siglo XVI, Ámsterdam experimentó un fuerte desarrollo que se puso de manifiesto especialmente el siglo siguiente, cuando tenía el puerto comercial más grande de Europa y era uno de los principales centros financieros del mundo. Tras un acusado declive provocado por las guerras napoleónicas, volvió la prosperidad a finales del siglo XIX, llegando a alcanzar entonces los ochocientos mil habitantes que aproximadamente se mantienen en la actualidad. El centro histórico de la localidad no presenta una acusada monumentalidad, pero mantiene una notable coherencia arquitectónica. Destacan la iglesia conocida como Oude Kerk, la construcción más antigua de la ciudad; el antiguo beguinaje al que los locales se refieren como Begijnhof; y la edificación barroca denominada Palacio Real. Aunque, además de los mencionados canales, quizás la característica más notable de Ámsterdam son sus museos, entre los que sobresalen el Rijksmuseum y el Museo Van Gogh sin olvidar la emotiva Casa de Ana Frank.