Cuatro procesiones se disputan el fervor popular a lo largo de la jornada del Viernes Santo en Murcia. De atrás hacia adelante, la cofradía del Santo Sepulcro muestra, entre otras tallas destacadas, la última imagen de Francisco Salzillo que sale en la Semana Santa local. Poco antes lo hace la cofradía de Servitas de las Angustias, cuyo paso principal porta una imagen de la Virgen de las Angustias, obra también del genial imaginero murciano. Va precedida ésta por la cofradía de la Misericordia, constituida a mediados del siglo XX y que saca en procesión una talla del siglo XVI, obra de Domingo Beltrán. Por su parte, a las seis de la mañana hora solar se inicia la denominada La Mañana de Salzillo, declarada Bien Inmaterial en la Región de Murcia y probablemente la más destacada de todas las procesiones murcianas. La cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno desfila durante unas siete horas portando nueve tronos, ocho de los cuales son obra de Francisco Salzillo, mientras que el restante, que da nombre a la hermandad, fue traído desde Italia a comienzos del siglo XVII. Popularmente conocidos como los moraos o los salzillos, ofrecen al respetable las más destacadas esencias de las procesiones locales, entre las que hay que mencionar sus características indumentarias a cara descubierta y tradiciones populares como el toque destemplado conocido como la burla.
