Palacio de Diocleciano (Split, Croacia)
Lugar de retiro del emperador homónimo tras abdicar a principios del siglo IV, el Palacio de Diocleciano constituyó el germen alrededor del cual se fue desarrollando la ciudad dálmata de Split. Se encuentra situado junto al mar y de su grandiosidad da idea el hecho de que podía albergar a casi diez mil personas en la época. Arquitectónicamente hablando, tiene forma rectangular, con torres de vigilancia situadas en tres de sus fachadas. El único de sus lados que no está protegido es el que da al mar. Su interior está dividido en dos mitades, una de ellas albergaba los aposentos del emperador, mientras que la otra servía como vivienda para sus servidores y soldados. Existen también estancias subterráneas, cubiertas por bóvedas de cañón. Mención especial merece el peristilo, hoy día reconvertido en una plaza más de la población.