Obra del siglo IX, la iglesia de San Donato se sitúa en la parte más antigua de la localidad dálmata de Zadar. Se trata de uno de los primeros templos construidos en Croacia, a la vez que la muestra de arte prerrománico más relevante del país. Arquitectónicamente hablando, presenta planta circular rematada por tres ábsides colocados de forma radial. El conjunto está coronado por una cúpula que se eleva hasta alcanzar casi los treinta metros de altura. Su aspecto recuerda a las iglesias carolingias y bizantinas iniciales y el interior destaca por su excelente acústica, celebrándose en él anualmente un concurrido concierto de música renacentista.