Aruba (Aruba)
De origen coralino, la isla caribeña de Aruba cuenta con una extensión que se aproxima a los doscientos kilómetros cuadrados. Colonizada por los españoles el último año del siglo XV, circulan varias versiones sobre su denominación, aunque un documento prueba que ya se la conocía con ese nombre apenas un cuarto de siglo más tarde. Más adelante, pasó a manos neerlandesas y así se ha mantenido hasta la fecha exceptuando unos pocos años de dominio inglés a comienzos del siglo XIX. Geográficamente hablando, es una isla plana que alcanza su máxima altitud en el monte Jamanota y el monte Hooiberg, colinas que no llegan a los doscientos metros de altura. Alberga interesantes arenales, entre los que destaca la denominada playa de Andicuri. Su economía está basada en el turismo y las plantaciones de áloe vera, abundante recurso natural en la isla, y su capital es la atractiva localidad de Oranjestad.