Comienza la cuenta atrás para Olga Grijalva. Mexicana y de Mexicali, Olga dio el salto a Europa hace unos años con el fin de cumplir su sueño de ir a Italia. Más adelante y por azares del destino terminó en Francia, aunque a veces sienta ese desarraigo que todos los que hemos tenido que renunciar a nuestros orígenes conocemos tan bien. Hace ya más de diez años que plasma sus vivencias en Charcotrip, blog de viajes con diversidad de destinos y un sinnúmero de experiencias. Aunque no tengo el placer de conocerla personalmente, me parece una persona inteligente, interesante y, especialmente, imaginativa. Cualidad esta última que tanto se echa de menos en lo que se refiere a esa multitud de blogueros de viaje que, por estar enfocados en la única idea de vivir del blog, resultan tan aburridamente previsibles. Con ustedes, Olga Grijalva.

10. El viajero, ¿nace o se hace?

Creo que uno ya nace así. Y es que a pesar de no tener posibilidades de realizarlos durante mi adolescencia y época universitaria acumulé sueños, curiosidades, cosas que en ese momento me decía «no, es imposible no tengo la edad/dinero para hacerlo».

En cuanto pude llevé a la realidad esos sueños guardados en el cajón.

En cambio he visto gente con la posibilidad de viajar todo lo que quiera pero simplemente no tienen ganas de hacerlo, no tiene nada de malo ya que tienen otros intereses.

Simplemente se es viajero o no.

9. ¿Vives para viajar o viajas para vivir?

Sin duda lo primero. Eso es lo que hace que renuncie a tener un automóvil propio e invierta mejor ese dinero en ahorrar para viajar, que no realice tantas salidas a restaurantes o eventos sociales en mi lugar de residencia para ahorrar para los viajes. Tampoco crean que me privo totalmente, tengo una vida de la cual no me quejo pero sí me doy cuenta que no tengo el deseo de hacer algunas cosas que la «gente normal» hace para poder ahorrar tiempo y dinero con el fin de cumplir mis ambiciones viajeras.

Lo de viajar para vivir lo podría aplicar también en el sentido de que es algo que me hace falta, necesito saber que tengo un viaje en la mira y poder planearlo, maquinarlo, tenerlo en la mente. Eso me hace feliz. Luego para «vivir» en el sentido de mantenerme gracias a eso, pues no.

8. Si alguna vez te pierdes, ¿dónde no deberíamos buscarte?

En una discoteca, sobre todo viajando. No digo que es una actividad que jamás haría, pero sería muy poco probable. Cuando me entero de alguien que fue a X país y que me cuenta que lo único que hizo fue irse de discoteca todas las noches y durmió durante el dia siento una pena enorme. Viajar para irse de juerga y no visitar nada del lugar no me llama la atención (y no tiene nada que ver con que ya no tengo veintitantos).

7. En España decimos que la cabra se dirige al monte…y tú, ¿hacia donde diriges tus pasos?

Hacia donde se pueda 🙂 aunque ahora me estoy enfocando más en Asia y América. Asia es lo desconocido y America es mi continente, algo que siento que debo conocer (tampoco es que sea una obligación que me pese 😉 )

6. ¿Estás de acuerdo con quien afirmó que viajar, como todas las drogas, requiere un aumento constante de la dosis?

En parte sí, aunque más que como droga lo veo como un «ya lo alcancé, ahora vamos por algo más grande» prefiero verlo como un logro más que como una adicción 😀 pero creo que es solo para no sentirme una junkie * risita *

5. ¿Crees que los prejuicios que suelen acompañar a quien no sale de su tierra se curan viajando? ¿O por el contrario el hecho de viajar los reafirma?

Antes pensaba que la primera afirmación era cierta. Luego me di cuenta que no necesariamente. Por desgracia he podido ver como muchos viajan y al contarlo están siempre comparándolo con su lugar de origen (pero de modo que siempre el lugar de origen es «mejor» que lo visitado). Afortunadamente me encuentro con más gente que cae en la primera afirmación, el problema es que tan sólo encontrarme a una de la segunda entristece enormemente.

4. En tus viajes, ¿te resulta más interesante el patrimonio cultural y natural de los lugares que visitas o te decantas por el patrimonio humano?

En mi caso prefiero decantarme por el patrimonio cultural y natural. Me hago una lista de los monumentos y lugares que quiero conocer. Los fotografío sin parar. Siento que los encuentros humanos vendrán solos y si se dan bienvenidos sean, pero no son el objetivo principal ya que no quiero forzarlos. Y no me gusta atosigar con mi lente a las personas, si ellas lo piden o lo permiten venga. Creo que el derecho a la imagen es algo personal.

3. ¿Buscas información sobre tus destinos en los blogs de viaje? ¿O te resultan tan aburridos que prefieres encontrarla en otros medios?

Hubo un tiempo en que solía hacerlo, pero ahora prefiero abstenerme ya que he llegado a un punto en que tengo demasiada información y tengo que sortear las opiniones. Prefiero quedarme con sitios que proporcionen hechos factuales (sin opinión) y de ahí decidir.

2. ¿Qué opinas de esas asociaciones españolas de viajeros de nombre tan anglosajón y cuyos miembros en buena parte desconocen la lengua de Shakespeare?

Están siguiendo una estrategia de unión «regional» en su mayoría lo cual es respetable, aunque para mí hacer esto es como cortar el espíritu global de los blogueros. En mi mundo ideal la asociación (teniendo nombre anglosajón o no) debería de unir a todos los blogueros que escribimos en español. No solo de España o de alguna de sus regiones. A veces me parece que se olvida que hay muchos más países que hablamos el mismo idioma y de los cuales habemos viajeros.

1. Una que no me resisto a hacerte: ¿Dónde te gustaría fotografiar la siguiente alcantarilla?

Pues la próxima será probablemente en la India, si es que encuentro. Ya nos ha pasado que hay países donde es imposible encontrar una alcantarilla con el nombre de la ciudad o país. Esperemos que haya suerte esta vez.

0. Para terminar la cuenta atrás y comenzar el viaje, indícanos tus cinco lugares que todo el mundo debería visitar antes de morir

Uy, esta lista es muy subjetiva ya que no he logrado ver todos los lugares del mundo pero aquí va:

En Japón: una ciudad moderna como Tokio en la cual se puede ver el contraste entre lo antiguo y lo moderno de golpe. Visitar también una ciudad más tradicional y calmada para terminar de ver el contraste (por ejemplo Nara).

En México: ir a la Ciudad de México ya que es enorme y está cargada de lugares históricos. Una vez ahí no dejar pasar la oportunidad de ir a Teotihuacan. No dejarse llevar por el amarillismo de las noticias pero tampoco dejar de lado las precauciones que dicta el sentido común. En el sur visitar alguna ciudad como Oaxaca (y el sitio arqueológico de Monte Albán). En el norte ir al desierto de Sonora y darse cuenta de la belleza que alberga.

Podría extenderme más, pero hasta aquí la dejo.

Espero que sigas fotografiando muchas alcantarillas más, Olga. Y, por supuesto, que nos las sigas mostrando en tu blog.