Entre los diversos temas recurrentes sobre los que escribo, el de la religión es uno al que suelo retornar una y otra vez. Generalmente por mi declarada afición a visitar todo lo que se considere un templo, bien sea por motivos éticos o estéticos, siempre presto a escuchar la historia que estos lugares tienen que contarme. Pero no solo por eso. También me resulta fascinante el permanente estado de búsqueda del ser humano, la incesante necesidad de respuesta a cuestiones tan intrínsecas como las relacionadas con su origen y su destino. ¿Quién soy? ¿De dónde vengo? ¿Adónde voy? Preguntas que todas las personas nos hemos hecho alguna vez y que las religiones intentan, al menos, resolver.

Tirando de Wikipedia, fuente más fiable de lo que muchos consideran, averiguo que en la actualidad existen unos cuatro mil doscientos credos en el mundo. También que casi un ochenta y cinco por ciento de los seres humanos declaran tener fe. Pero, ¿qué es la religión? Se conoce como tal al conjunto de creencias y ceremonias mediante las cuales el ser humano establece una relación con la divinidad. Algunos de los rituales que todas las religiones llevan asociados, como oficios o misas, suelen celebrarse de manera comunitaria, mientras que otros, como la oración, forman parte del ámbito privado de la persona.

Cristianismo, Islam, hinduismo y budismo engloban aproximadamente a cinco mil quinientos millones de personas, más de un setenta por ciento de la población mundial. Un quince por ciento de los seres humanos se declaran no religiosos, mientras que el quince por ciento remanente está repartido entre el resto de los más de cuatro mil credos distribuidos a lo largo y ancho de la superficie terrestre. Cuarenta de ellos, aportando algunos datos y destacando su templo más significativo entre los que he tenido ocasión de visitar, son descritos a continuación.

Islam suní: Unos mil seiscientos millones de fieles siguen los preceptos del sunismo, principal rama del Islam. Su denominación deriva de su condición de devotos de la Sunna, sumario del estilo de vida de Mahoma. Creen que el profeta no designó a un sucesor y aceptan como tal a su suegro Abu Bakr, quien se convirtió en el primer califa islámico. Tras la Kaaba en La Meca y la mezquita del Profeta en Medina, su templo más sagrado es la mezquita al-Aqsa en Jerusalén.

Iglesia católica romana: El catolicismo no es un credo unitario, puesto que está dividido en nada menos que veintitrés Iglesias. La más numerosa es la denominada Iglesia católica romana, Iglesia latina o Iglesia de Occidente, cuya cabeza visible es el obispo de Roma, frecuentemente conocido como el Papa. Actualmente cuenta con unos mil trescientos sesenta millones de fieles y su templo de referencia es la vaticana Basílica de San Pedro.

Hinduismo: Tampoco es unitario el hinduismo, que está compuesto por una amalgama de creencias que van del politeísmo al ateísmo, pasando por el monoteísmo, el panteísmo o el deísmo. Surgido en la India alrededor del siglo X a.C., más adelante fue extendiéndose a otros lugares y sus seguidores se estiman en unos mil ciento cincuenta millones en la actualidad. El lugar con mayor porcentaje de fieles hinduistas es la isla indonesia de Bali, donde aproximadamente un 92% de la población lo practica. Los nueve templos hinduistas balineses más sagrados se conocen como sad kahyangan y uno de ellos es el denominado Pura Ulun Danu.

Budismo mahayana: Al igual que el hinduismo, el budismo se basa en el dharma, concepto procedente del sánscrito y que define una correcta conducta piadosa. También se originó en la India, lugar de nacimiento de Siddharta Gautama alrededor del siglo VI a.C., y desde allí se extendió hacia China y el Sudeste Asiático. Su rama principal es la denominada mahayana, presente en todo el este de Asia y practicada por unos trecientos sesenta millones de fieles. Se basa en la existencia del karma como conjunto de acciones encaminadas a alcanzar el nirvana. El diseño de los templos mahayana suele ser elaborado y a veces incluye jardines, como en el caso de los templos zen. Un buen ejemplo es el famoso Kinkaku-ji, en la localidad japonesa de Kioto.

Islam chií: Segunda rama del Islam por número de seguidores, el chiismo se basa en la creencia de que Mahoma nombró como sucesor a su yerno Ali ibn Abi Talib. El término chií deriva del árabe shi’a, que significa seguidor. Por consiguiente, los aproximadamente doscientos cincuenta millones de chiitas son los seguidores o partidarios de Alí. Están distribuidos generalmente por Irán, Irak y Azerbaiyán y los templos exclusivamente chiitas más sagrados son la mezquita del Imam Ali en la ciudad iraquí de Najaf, la mezquita del Imam Husayn en la también iraquí Kerbala y el imamzadeh Fatima al-Masumeh en la población iraní de Qom.

Taoísmo: Basado en las enseñanzas que Lao Tse transmitió en su obra Dào Dé Jīng, escrita aproximadamente en el siglo VI a.C., el tao, que se traduce como camino, muestra el sendero que debe seguir la persona para vivir una existencia en armonía. Extendido por China durante el siglo IV a.C., influenció tanto a la medicina tradicional como a las artes marciales locales, con mención especial al taijiquan, vulgarmente conocido como taichi. Aproximadamente ciento setenta y cinco millones de personas siguen el camino emprendido por Lao Tse, la mayor parte de ellas en China y otros puntos del Sudeste Asiático. Uno de sus santuarios más relevantes es Thian Hock Keng, localizado en Singapur y cuyo templo principal está dedicado a Mazu, diosa taoísta del mar.

Iglesia ortodoxa rusa: Tras el catolicismo y el protestantismo, la rama más numerosa del cristianismo es la ortodoxia. Este credo no es homogéneo, puesto que a su vez se reparte entre quince Iglesias autocéfalas, cada una de ellas dirigida por un patriarca local. La Iglesia ortodoxa está presente fundamentalmente en el este de Europa y entre sus particularidades hay que mencionar la negación del purgatorio, la ordenación de hombres casados y el uso del calendario juliano para fijar la Pascua. Algo más de ciento cincuenta millones de fieles tiene la Iglesia ortodoxa rusa, cuya sede patriarcal está en Moscú. En la capital de Rusia también se halla la catedral de San Basilio, posiblemente su templo más carismático.

Budismo theravada: Aunque menos practicada que la mahayana, la theravada se considera la rama más tradicional del budismo debido a su entronque con su versión india original. Predominante en Sri Lanka y diversos países del Sudeste Asiático, sus fieles suman unos ciento cincuenta millones. Su objetivo sigue siendo alcanzar el nirvana, pero intenta llegar a ese estado desde un enfoque más conservador y basado en la disciplina. El diseño de sus templos suele presentar una gran simplicidad, tal y como puede verse en Sri Dalada Maligawa, localizado en la población ceilanesa de Kandy.

Sintoísmo: Considerada la religión indígena por excelencia de Japón, el shintō se fundamenta en la veneración de unos espíritus sobrenaturales que habitan en la naturaleza y a los que se conoce como kami. La estrecha relación entre estos entes y el mundo natural en el que se desenvuelven ha llevado a considerar el sintoísmo una creencia animista. Se considera que algo más de cien millones de personas realizan ritos relacionados con este culto, de las cuales unos cinco millones lo practican de manera regular. El culto a los kami se lleva a cabo en el propio hogar, en una especie de altares llamados kamidana y en santuarios a los que se denomina jinja. Uno de los más venerados de estos últimos es Tōshō-gū, localizado en la población de Nikkō.

Iglesia anglicana: Cerca de cien millones de seguidores tiene la Iglesia anglicana, surgida en el siglo XVI y, por consiguiente, coetánea de la Reforma protestante. Fue el monarca Enrique VIII quien decidió la ruptura, aprovechando que la Iglesia católica no le permitía acceder a algunos de sus deseos. Las diferencias del anglicanismo con el catolicismo son menores que las de Iglesias protestantes como el luteranismo o el calvinismo, pero aun así rechazan el celibato sacerdotal, no reconocen la autoridad del Papa y solo admiten como sacramentos el bautismo y la eucaristía. Cuarenta y dos catedrales anglicanas existen en el Reino Unido, entre ellas la catedral de Salisbury.

Iglesia luterana: Liderados por disidentes como Lutero, Calvino, Zwingli o Hus, los protestantes se separaron de la Iglesia católica en el siglo XVI. Hoy día forman un grupo heterogéneo que reúne a más de ochocientos millones de seguidores, influidos por una doctrina en la que conviven dogmas como la negación del papado, el rechazo a la veneración de imágenes y reliquias, la negativa a la existencia del purgatorio y la falta de fe en la Inmaculada Concepción de María. Tras la baptista, su rama más numerosa es la luterana, que congrega a unos ochenta millones de fieles distribuidos por todo el mundo. Sus templos son austeros y carecen por completo de imágenes, como puede comprobarse en la magnífica iglesia de San Lorenzo de Núremberg.

Iglesia calvinista: Nacido en Suiza, el calvinismo fue desarrollado por teólogos como Zwingli o Bullinger, su sucesor como jefe de la Iglesia de Zúrich. A ellos se les añadió Calvino, quien pulió la doctrina y acabó dándole nombre. La principal diferencia entre el calvinismo y el resto de credos protestantes es el énfasis en la autoridad de Dios y la conexión directa entre el creyente y la divinidad que propone la primera, dejando a la Biblia un papel secundario. Setenta y cinco millones de personas se declaran calvinistas y uno de sus templos fundamentales es la sobria Grossmünster de Zúrich.

Vudú: Resulta difícil establecer cuando dio comienzo el conjunto de prácticas conocido como vudú, aunque parece que surgió entre las etnias aja, ewé y fon, establecidas en los actuales estados africanos de Ghana, Nigeria, Togo y Benín. De allí pasaron a América, donde adquirieron connotaciones propias que derivaron en ritos como los del vudú haitiano y el candomblé brasileño. En total, unos sesenta millones de personas siguen este credo, bien en exclusividad o bien mediante un marcado sincretismo con otras creencias animistas e incluso cristianas. Un ejemplo de sus templos lo constituye el misterioso Templo de las Pitones, localizado en la población beninesa de Ouidah.

Iglesia ortodoxa de Etiopía: País de larga tradición cristiana, aproximadamente un sesenta y cinco por ciento de la población de Etiopía profesa esta fe. Aunque existen minorías católicas y protestantes, es la Iglesia ortodoxa de Etiopía la que congrega a la mayor parte de los fieles, que se estiman en unos treinta y seis millones en todo el mundo. Esto la convierte en la mayoritaria entre las Iglesias ortodoxas orientales y la segunda entre toda la ortodoxia, tras la iglesia ortodoxa rusa. Su patriarca, o abune, reside en Addis Abeba y predica el monofisismo, es decir la existencia tan solo de la naturaleza divina en Jesucristo. Con ello se opone al catolicismo y al resto de Iglesias ortodoxas, excepto las orientales. Aun así, uno de sus templos más sagrados es la iglesia del Santo Sepulcro, situada en Jerusalén y que comparte con otras Iglesias cristianas.

Iglesia ortodoxa rumana: Atendiendo al número de seguidores la rumana es la segunda Iglesia ortodoxa autocéfala más importante, puesto que cuenta con unos veinte millones. Ligeros detalles la diferencian del resto de las quince Iglesias autocéfalas, como el hecho de ser la única que emplea una lengua romance en sus ritos. La sede del patriarcado se encuentra en Bucarest y, a la espera de la finalización de las obras de la catedral de la Salvación del Pueblo Rumano, que será la iglesia ortodoxa más grande del mundo, uno de sus templos más carismáticos es la encantadora Iglesia Stavropoleos, localizada también en Bucarest.

Judaísmo: Imposible es fijar el nacimiento del judaísmo, aunque suele considerarse a Abraham como el primer hebreo. De acuerdo con la tradición bíblica la vida de este profeta debió transcurrir en algún periodo entre los siglos XX y XV a.C., lo que convertiría al judaísmo en una de las religiones más antiguas del mundo. Unos quince millones de fieles, la mayor parte de ellos en Estados Unidos e Israel, practican este credo, basado en las enseñanzas del Antiguo Testamento y la Torá. Sus símbolos principales son la estrella de David y la Menorá, candelabro ritual de siete brazos, mientras que su templo más sagrado lo fue el denominado Templo de Jerusalén, del que actualmente solo se conserva el famoso Muro de las Lamentaciones.

Iglesia ortodoxa copta: Se denominan coptos a los egipcios que profesan algún tipo de creencias cristianas, bien sea en el ámbito de la Iglesia católica copta, la Iglesia evangélica copta o la Iglesia ortodoxa copta. Esta última es la mayoritaria de las tres y congrega a cerca de quince millones de fieles en África y otras zonas del mundo. La mayor parte de ellos están en Egipto, especialmente en Alejandría y El Cairo, donde esta Iglesia tiene su sede. No está entre las quince Iglesias ortodoxas autocéfalas, puesto que no reconoce la autoridad del patriarca de Constantinopla y, por consiguiente, ejerce una ortodoxia sui generis. Sigue el rito copto en la liturgia y la ya nombrada iglesia del Santo Sepulcro es uno de sus templos de referencia.

Iglesia ortodoxa de Ucrania: La Iglesia ortodoxa en el territorio de Ucrania se subdivide en dos ramas: la Iglesia ortodoxa ucraniana del Patriarcado de Moscú, dependiente del patriarcado moscovita como su nombre indica; y la Iglesia ortodoxa de Ucrania, que usa el idioma ucraniano en la liturgia y es autocéfala desde 2019. Esta última está liderada por el arzobispo de Kiev y tiene su sede en la catedral de San Miguel de las Cúpulas Doradas. Aunque es difícil dar un dato exacto, al menos doce millones de personas siguen este credo, uno de cuyos templos más significativos es la iglesia de los Tres Santos de Chernivtsi.

Iglesia ortodoxa serbia: Numerosas iglesias y monasterios pertenecientes a la Iglesia ortodoxa serbia están dispersos por el territorio de Serbia, Montenegro, Bosnia-Herzegovina e incluso todavía en Kosovo, a pesar de que muchos de sus templos han sido destruidos allí. Sobresale entre ellos el extraordinario monasterio de Studenica, cerca de la ciudad de Kraljevo. La Iglesia ortodoxa serbia es autocéfala desde comienzos del siglo XIII y su sede se encuentra en Belgrado. Aproximadamente once millones de personas siguen sus preceptos, casi un ochenta y cinco por ciento de la población serbia entre ellos.

Iglesia ortodoxa armenia: Más conocida como Iglesia apostólica armenia, la Iglesia ortodoxa armenia es la Iglesia nacional más antigua del mundo. Fue el rey Tiridates III quien se convirtió al cristianismo en el año 301 y lo convirtió en la religión oficial de su reino. Desde entonces, esta creencia no ha abandonado al históricamente castigado pueblo armenio. La Iglesia ortodoxa armenia no está reconocida como uno de los quince credos autocéfalos que componen la ortodoxia, debido a su no aceptación de los principios establecidos en el Concilio de Calcedonia. Sus seguidores se estiman en unos diez millones y su sede suprema se encuentra en la catedral de Echmiadzin.

Iglesia ortodoxa griega: En contra de lo que suele pensarse, la Iglesia ortodoxa griega no es de las Iglesias nacionales más antiguas que existen. A pesar de que la ortodoxia ha ejercido un papel primordial en la sociedad griega desde hace siglos, la Iglesia ortodoxa de Grecia solo es autocéfala desde la primera mitad del siglo XIX. Algo menos de diez millones de fieles tiene este credo, que destaca por su elevado número de monasterios, estimados en unos quinientos cincuenta actualmente. Aunque su templo más significativo es, sin duda, la ya mencionada iglesia del Santo Sepulcro.

Iglesia ortodoxa búlgara: Asimismo autocéfala, la Iglesia ortodoxa búlgara se distribuye tanto por el territorio de Bulgaria como por otros lugares del mundo, incluidos América o Australia. Obtuvo su autocefalia a comienzos del siglo X, convirtiéndose en la Iglesia ortodoxa eslava más antigua. Cuenta con unos ocho millones de seguidores, seis y medio en el estado búlgaro y uno y medio en la diáspora. Su sede patriarcal se encuentra en Sofía y dispone de numerosos monasterios, eremitorios e iglesias rupestres por todo el país. Una de estas últimas es la iglesia de la Santa Virgen María de Ivanovo, que alberga extraordinarias pinturas murales.

Iglesia ortodoxa siria: Diversas denominaciones se han utilizado en el tiempo para referirse a la actualmente conocida como Iglesia ortodoxa siria. Al no admitir los acuerdos del Concilio de Calcedonia, no reconoce la autoridad del patriarca de Constantinopla y, por consiguiente, no está considerada una de las quince Iglesias ortodoxas autocéfalas. Está liderada por el denominado Patriarca de Antioquía y Todo el Oriente, que reside en Damasco, y la liturgia se realiza en idioma siríaco o caldeo. Su número de seguidores varía según las fuentes, aunque se estiman en cerca de ocho millones en todo el mundo, y uno de sus templos fundamentales es la anteriormente referida iglesia del Santo Sepulcro.

Confucianismo: Confucio fue un filósofo chino que vivió a caballo entre los siglos VI y V a.C. Posiblemente coincidió en el tiempo con Lao Tse, de cuya doctrina derivó el taoísmo, aunque, a diferencia de éste, Maestro Kong, que es lo que significa su nombre en chino, se consideraba un mero transmisor de los conocimientos desarrollados por sabios precedentes. La enseñanza confuciana tiene como meta alcanzar la armonía, tanto familiar como celestial, y en ella priman valores como la bondad, el respeto por los mayores y la piedad filial. Sus seguidores se estiman en unos seis millones y se considera que Jongmyo, localizado en Seúl, es el templo confucianista que ha servido durante más tiempo como tal.

Iglesia ortodoxa de Constantinopla: Surgida tras la refundación de Bizancio en el año 330, la Iglesia ortodoxa de Constantinopla fue impulsada por el emperador romano Constantino el Grande, quien estableció el arzobispado en la ciudad. Desde el cisma de Oriente, ocurrido en 1054 y que separó a la ortodoxia del catolicismo, el patriarca de Constantinopla ostenta la primacía de honor entre los jerarcas ortodoxos, bajo la denominación de patriarca ecuménico. Los fieles de este credo hoy día superan los cinco millones si se incluyen los cristianos ortodoxos de Turquía y el Egeo. Aunque la sede patriarcal actual se encuentra en Fanar, barrio de Estambul, su templo históricamente más significativo es la grandiosa Santa Sofía, que ejerció como catedral durante varios siglos.

Iglesia ortodoxa georgiana: Aproximadamente cinco millones de practicantes componen la Iglesia ortodoxa georgiana, creada tan solo unas décadas después que la armenia y, por consiguiente, una de las Iglesias nacionales más antiguas que existen. Su fundadora fue Ninó, sobrina de San Jorge, quien introdujo el cristianismo en Georgia a comienzos del siglo IV. El Primado recibe el nombre de Catolicós-Patriarca y a su vez ostenta el título de Arzobispo de Mtskheta-Tbilisi. La sede del patriarcado radica en las tres catedrales de esa eparquía, una de las cuales es la catedral Svetitskhoveli de Mtskheta.

Iglesia greco-católica ucraniana: Veintidós de las veintitrés ramas en las que se divide el catolicismo las forman las denominadas Iglesias orientales. La más numerosa de ellas es la Iglesia greco-católica ucraniana, que cuenta con unos cuatro millones y medio de fieles. Éstos se concentran principalmente en territorio de Ucrania, pero también hay minorías en países como Polonia, Francia, Canadá o Estados Unidos. Se separó de la Iglesia latina a mediados del siglo XI, tras el denominado Cisma de Oriente, y es una Iglesia sui iuris, es decir, goza de plena autonomía. Sigue el rito litúrgico bizantino y uno de sus templos es la iglesia de San Nicolás de la localidad ucraniana de Chernivtsi.

Iglesia ortodoxa macedonia: No reconocida por ninguna de las Iglesias ortodoxas autocéfalas, la Iglesia ortodoxa macedonia declaró su independencia de la Iglesia ortodoxa serbia hace aproximadamente medio siglo. Cuenta con más de dos millones de seguidores y sus oficinas centrales están en Skopje y Ohrid. Forman parte de ella aproximadamente dos mil iglesias y monasterios, sobresaliendo entre estos últimos el bucólico monasterio de San Naum, ubicado a orillas del lago Ohrid.

Iglesia protestante en los Países Bajos: Producto de la fusión entre las Iglesias reformadas en los Países Bajos y la Iglesia evangélica luterana en los Países Bajos, la Iglesia protestante en los Países Bajos aúna los principios luteranos y calvinistas en este país europeo. Esta unión tuvo lugar en 2004 y la doctrina resultante es una mezcla de ambas con añadidos contemporáneos como la ordenación de mujeres y la bendición de los matrimonios homosexuales. Sus fieles se estiman en un millón seiscientos mil y un excelente ejemplo de sus templos es la denominada Grote Kerk, antigua catedral católica de Haarlem.

Iglesia greco-melquita católica: Otra de las veintidós Iglesias orientales es la Iglesia greco-melquita católica. A diferencia de la anterior, presidida por un arzobispo mayor que debe ser confirmado por el Papa, ésta es dirigida por un patriarca que dispone de un poder plenario. La sede del patriarca se encuentra en Damasco y su millón y medio de fieles están dispersos por Oriente Medio en general, aunque también se encuentran en otras zonas del mundo. La Iglesia Sinagoga de Nazaret está administrada por esta comunidad desde el siglo XVIII.

Iglesia ortodoxa chipriota: Frecuente y simplemente conocida como Iglesia de Chipre, la Iglesia ortodoxa chipriota se convirtió en autocéfala durante la primera mitad del siglo V. Su máxima autoridad eclesiástica es el Santo Sínodo, presidido por el arzobispo de Nueva Justiniana y Todo Chipre, con sede en Nicosia. De su importancia en la isla da idea el hecho de que uno de sus arzobispos, Makarios III, fue el primer presidente del estado independiente chipriota. Más de ochocientas mil personas están adscritas a este credo, uno de cuyos templos más significativos es la encantadora iglesia de Agios Nikolaos tis Stegis.

Iglesia ortodoxa albanesa: Justo este año se cumple un siglo desde que la Iglesia ortodoxa albanesa fue declarada autocéfala. Desde entonces ha sufrido diversas vicisitudes, especialmente entre 1967 y 1991, cuando Albania fue oficialmente un estado ateo y el culto estaba prohibido. A partir de la caída del comunismo vivió un importante resurgimiento y numerosas iglesias y monasterios fueron reconstruidos o restaurados. En la actualidad el número de parroquias se acerca al millar y el de monasterios a los ciento cincuenta tan solo en territorio albanés. Sus fieles se estiman en unos setecientos mil, probablemente más incluyendo la diáspora, y uno de sus templos más destacados es la iglesia de la Anunciación de Tirana.

Iglesia ortodoxa de Alejandría: A pesar de que la Iglesia ortodoxa de Alejandría celebra sus ritos en idioma griego, su distribución se ciñe exclusivamente al continente africano. Esta Iglesia surgió en la ciudad egipcia a la que hace referencia y fue constituida como tal a mediados del siglo VI. Resulta complicado cuantificar su número de seguidores, aunque se estima que superan los quinientos mil. Sus sedes principales se encuentran en Alejandría y El Cairo, ciudad esta última en cuyo barrio copto se ubica la iglesia de San Jorge, posiblemente su templo más histórico.

Iglesia ortodoxa de Jerusalén: Reconocida en el Primer concilio de Nicea, que se celebró allá en el año 325, la Iglesia ortodoxa de Jerusalén está considerada en la ortodoxia como la Iglesia madre de toda la cristiandad. Su liturgia sigue el rito bizantino y sus festividades se fijan de acuerdo con el calendario juliano. Alrededor de quinientas mil personas la siguen en Tierra Santa y algunas más en la diáspora, puesto que dispone de iglesias y monasterios en lugares como Grecia, Rusia, Turquía o Egipto. Su patriarcado se encuentra en Jerusalén, donde ejerce como catedral la iglesia del Santo Sepulcro, y su siguiente templo más destacado es la iglesia de la Natividad de Belén, que comparte con otras Iglesias cristianas.

Iglesia greco-católica rumana: Ferozmente perseguida por el régimen comunista, que confiscó sus propiedades y encarceló a sus obispos y sacerdotes, la Iglesia greco-católica rumana estuvo a punto de desaparecer. A pesar de ello, esta Iglesia sui iuris, que mantiene el rito litúrgico bizantino, todavía cuenta en la actualidad con medio millón de fieles, la mayor parte de ellos establecidos en Transilvania. Su sede se halla en la ciudad de Blaj y uno de sus templos más destacables es la espectacular iglesia de los Santos Arcángeles de Şurdeşti.

Iglesia ortodoxa estonia del Patriarcado de Moscú: Actualmente existen en Estonia dos ramas de la Iglesia ortodoxa: la Iglesia ortodoxa de Estonia y la Iglesia ortodoxa estonia del Patriarcado de Moscú. Ninguna de ellas es autocéfala, puesto que la primera está bajo la jurisdicción del Patriarcado de Constantinopla y la segunda depende del moscovita, como indica su nombre. Esta última cuenta con unos ciento cincuenta mil seguidores, distribuidos en treinta y una congregaciones. Su sede está en Tallinn y su templo más renombrado es la catedral de Alexander Nevsky, sito en la capital estonia.

Zoroastrismo: Credo antiquísimo donde los haya, los orígenes del zoroastrismo o mazdeísmo se remontan a unos cuatro mil años atrás. Está basado en la devoción a Ahura Mazda a través de las enseñanzas de Zoroastro, de ahí los nombres con los que es conocido. Divulgada por el emperador aqueménida Ciro el Grande, esta religión tiene como símbolo el fuego eterno, representación de su divinidad, hecho que aún se pone de manifiesto en lugares como el Templo del Fuego de la ciudad iraní de Yazd. Cuenta en la actualidad con unos ciento treinta mil seguidores, la mayor parte de ellos en la India e Irán.

Iglesia libre de Tonga: Cualquiera que haya visitado Tonga sabrá que la religión juega un papel importantísimo en la vida de sus habitantes. Uno de los principales credos en el país es el denominado Iglesia libre de Tonga, que fue establecido por el rey Tupou I a finales del siglo XIX. Su origen es metodista, aunque el mencionado monarca lo adaptó a la idiosincrasia local. Actualmente tiene unos doce mil seguidores, que equivalen a un porcentaje similar de la población tongana, y su lugar de culto más importante es la denominada Iglesia del Centenario, localizada en Nuku’alofa, la capital estatal.

Crédito: jackal007

Iglesia greco-católica bielorrusa: Tres credos se reparten la práctica totalidad de los creyentes en Bielorrusia: la Iglesia ortodoxa bielorrusa, dependiente de la Iglesia ortodoxa rusa; la Iglesia católica romana; y la Iglesia greco-católica bielorrusa. Esta última es una de las veintitrés ramas que forman la Iglesia católica y sigue el rito litúrgico bizantino. Está organizada en dos arciprestazgos y cuenta con una veintena de parroquias en territorio bielorruso más algunas en la diáspora. Sus seguidores se calculan en apenas diez mil y uno de sus lugares de culto es la iglesia de los Santos Simón y Elena de Minsk, que comparten con la Iglesia católica romana.

Helenismo: Zeus y el resto de los dioses olímpicos vuelven a estar de moda con el resurgimiento de la religión de la Antigua Grecia. El helenismo es un credo de nuevo cuño, pero que está pujando fuerte. Tanto, que incluso ha sido admitido como religión oficial en el país heleno. Se trata de un culto politeísta, cuyas creencias están reflejadas en los textos de poetas clásicos como Homero y Hesíodo. Sus seguidores oficiales en Grecia se estiman en unos dos mil, aunque probablemente haya muchos más repartidos por el mundo. Y, ¿sabéis cuál es su principal lugar de culto? Lo habéis adivinado: el archifamoso, ultrareconocido e hipervalorado Partenón.